MÁLAGA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
El que fuera juez de Instrucción número 3 de Málaga A.V.F.G. negó hoy "rotundamente" que realizara llamadas amenazantes a un hombre, con el que tenía una deuda pendiente, para conseguir que éste no testificara en su contra en un procedimiento abierto en el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), aunque sí reconoció que le telefoneaba para salir y porque tenían un amigo en común.
El Juzgado de lo Penal número 4 de Málaga acogió hoy el juicio contra este ex magistrado, que se enfrenta a la petición de un año y medio de cárcel por parte del fiscal, quien mantuvo su acusación inicial por un delito de obstrucción a la justicia; mientras que la defensa insistió en pedir una sentencia absolutoria. El juicio quedó visto para sentencia.
Los hechos que se juzgan sucedieron en Villanueva del Trabuco (Málaga) entre los días 2 y 3 de enero de 2005, cuando el acusado "realizó varias llamadas al teléfono móvil", en las que aludía "a la declaración que había prestado ante la Policía Judicial", con el fin de "amedrentarle, aludiendo a su condición de juez". En la última llamada, el procesado usó diversas expresiones en italiano "alusivas a prácticas mafiosas", para terminar diciendo: "Tú muerto", según señala la acusación pública.
El acusado reconoció que le había llamado "infinidad de veces" para "tomar copas", pero no para amenazarle. De hecho, dijo que en la actualidad lo saluda y entendió que "no existe enemistad", a pesar de esta causa y de la deuda que le reclamaba. Recordó que esos días pudo telefonearlo para que le pusiera en contacto con una persona que era amigo común.
Relató a la jueza que en esos momentos estaba separado de su mujer, a quien pertenecía el teléfono desde el que se hicieron las llamadas, y ya no vivía en casa, aunque dijo que iba a veces. Además, aseguró que en esas fechas tenía "una depresión muy grande" por la causa que se seguía en el TSJA, que le condenó por dos delitos de cohecho y tres de prevaricación en relación a la puesta en libertad de un presunto narcotraficante.
En su derecho a la última palabra, el ex juez, que fue absuelto hace unos días por el Tribunal Supremo (TS) de los delitos de cohecho y de un delito de prevaricación, solicitó el "beneficio de la duda" y que se tenga en cuenta que podía haber negado conocerlo o que lo había llamado.
Por su parte, el denunciante, que declaró como testigo, aseguró que sintió "miedo porque era un juez y yo no soy nada" y afirmó que denunció en la Fiscalía de Granada por consejo de unos abogados. Así, admitió que ambos conocían a una persona, que los presentó y dijo que hubo varias llamadas amenazantes y que, aunque cambió la voz, reconoció al magistrado.
La fiscal aseguró que hay dos versiones contradictorias, aunque mantuvo que el acusado está "faltando a la verdad", mientras que lo dicho por el testigo "es la verdad, porque está obligado por la ley". Además, indicó que existe un hecho objetivo, que es el listado de llamadas.
La defensa del procesado, por contra, coincidió en que son dos versiones contradictorias, aunque estimó que el testigo, del que dijo que es dueño de un prostíbulo, es el que "no ha dicho la verdad ni aquí ni cuando declaró en Granada". Además, recordó que su cliente fue absuelto por la causa abierta por la presunta deuda.
