Una falso aviso de bomba provoca el caos en el aeropuerto de Ibiza

Actualizado: domingo, 1 julio 2007 2:01

IBIZA/MADRID, 1 Jul. (OTR/PRESS)

Una llamada anónima al diario 'Gara' y a la Asociación de Ayuda en Carretera de Euskadi (DYA) advirtiendo de la colocación de un artefacto explosivo en el aeropuerto de Ibiza provocó ayer un auténtico caos en las instalaciones aéreas de esta isla balear durante al menos cuatro horas. Tras el despliegue del dispositivo de seguridad y un operativo policial que peinó de arriba a abajo el aeropuerto, se comprobó que se trataba de un falso aviso y se desactivó el dispositivo. Se calcula que unos 13.000 pasajeros y unos 37 vuelos se vieron afectados por el desalojo de las instalaciones, que volvieron a funcionar con normalidad en torno a las 16.00 horas de esa misma tarde.

Todas las alarmas saltaron después de las 12.00 horas de la mañana de ayer, cuando un comunicante anónimo telefoneó al diario vasco 'Gara' y al DYA para alertar de la colocación de un artefacto explosivo en las instalaciones aeroportuarias que iba a explotar en "45 minutos". Casi simultáneamente, otra voz anónima llamaba al 'Diario de Mallorca' para dar constancia del aviso. Poco después, varias personas que se encontraban en ese momento en el aeropuerto de Ibiza afirmaron haber oído una explosión de escasa potencia y otras fuentes precisaron que se trataba de un paquete sospechoso que había sido detonado por la Policía.

Aunque el Ministerio del Interior desmintió esas informaciones, las autoridades isleñas desplegaron el dispositivo de emergencia pertinente, procedieron a la rápida evacuación del aeropuerto -en unos 10 minutos- "en un clima de tranquilidad y colaboración por parte de los trabajadores y los usuarios" y suspendieron todos los vuelos de salida y llegada previstos. Más de 3.000 personas se desperdigaron entonces en los alrededores de las instalaciones aeroportuarias, centenares de ellas trataban de confirmar por cualquier medio la veracidad de los rumores que indicaban que las Fuerzas de Seguridad habían detonado un artefacto colocado en el interior del edificio.

Un dispositivo policial integrado por agentes de la Guardia Civil, la Policía Nacional y Aviación Civil trabajó en profundidad durante cerca de cuatro horas para tratar de averiguar si, efectivamente, en el interior del aeropuerto había un artefacto explosivo. Al parecer, las Fuerzas de Seguridad encontraron en el aeropuerto dos paquetes, uno de ellos en una papelera en el aparcamiento de la zona reservada a los vehículos de alquiler. Sin embargo los perros especialistas no lo señalaron como explosivo, por lo que se utilizó un robot de desactivación a distancia que comprobó que era una simple caja de zapatos vacía.

RUIDOS DE UN ROBOT

En su funcionamiento, el robot emite ciertos sonidos que han podido ser confundidos con una deflagración, lo que explicaría que varios testigos presenciales informaran de que habían escuchado una detonación de escasa potencia, informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en Baleares. Posteriormente, sobre las 14.35 horas fue localizada una mochila en la zona del aparcamiento que, por prevención, fue detonada sin hallar en su interior más que efectos personales. Por precaución, los bomberos y personal médico del aeropuerto se desplazaron hasta las inmediaciones del aeropuerto y habilitaron una zona acordonada para quien requiriese asistencia.

Tras comprobar que se trataba de un falso aviso de bomba, sobre las 15.45 horas las autoridades ibicencas desactivaron el dispositivo de seguridad y las Fuerzas de Seguridad permitían a los trabajadores del aeropuerto volver a sus puestos. A las 16:09 horas aterrizaba el primer avión procedente de Milán (Italia) y a las 16:11 se llamaba a la zona de embarque a los pasajeros con destino a Londres. Poco después, el ambiente que se respiraba en el aeropuerto de Ibiza era de "tranquilidad" y sus instalaciones operaban "con normalidad", según confirmaron fuentes de Aeropuertos Españoles de Navegación Aérea (ANEA).

Entre 12.000 y 13.000 viajeros de 37 vuelos de salida y llegada -12 de los cuales fueron desviados a otros aeropuertos- se vieron afectados por el desalojo y la interrupción de la actividad del aeropuerto de esta isla mediterránea debido a ese falso aviso de bomba. Además, 25 personas fueron atendidas con problemas leves, principalmente causados por el calor. Concretamente, y sólo para la jornada de ayer, las instalaciones aeroportuarias tenían prevista una afluencia de más de 40.000 personas y un total de 307 aeronaves, según aseguraron desde AENA.