BARCELONA, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
El secretario general y portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, afirmó hoy que el acuerdo de financiación autonómica no implica un "acto de fe" de los republicanos hasta que se materialice en ley ni el apoyo estable al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, de quien dijo que "no es de fiar".
Ridao dijo que el pacto de la financiación "no presupone un voto favorable de ERC a los Presupuestos Generales del Estado" y dijo que hoy por hoy apuestan por "votar en contra", si bien hay margen para la negociación. "Podemos hablar sobre ello", agregó.
Argumentó que hay que conocer los textos antes de garantizar el apoyo a los Presupuestos, la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca), la Ley de Cesión de Tributos y la Ley de Economía Sostenible, además del modelo final de gestión del Aeropuerto de El Prat y poner en marcha el traspaso de Cercanías a la Generalitat.
Apuntó que no habrá un apoyo fijo a Zapatero como en la primera legislatura, cuando el presidente español "pasó de decir 'sí' a todo al incumplimiento sistemático" en cuanto a la aprobación del Estatut. En esta ocasión los acuerdos deberán concretarse en cada una de las normativas y remarcó que "los votos de ERC son decisivos". "Si la letra de la ley no nos gusta, aunque la música suene bien, diremos que no", aseveró. "No daremos un cheque en blanco ni un 'sí' gratis", aseguró.
ERC inició hoy en la Cámara de Comercio de Barcelona una ronda de contactos con los agentes económicos y sociales de Catalunya para presentar el acuerdo de financiación. Inició el periplo con el presidente de la Cámara, Miquel Valls, porque fue él quien por primera vez dio la cifra de 3.800 millones de euros de recursos adicionales para Catalunya que debía asegurar el nuevo modelo de financiación, la misma que ERC.
En un encuentro posterior con los medios, Ridao alabó las bonanzas del acuerdo y dijo que el fin de semana pasado, tras tener interlocución directa con Zapatero, se logró arrancar 3.855 millones de euros de recursos adicionales para 2012, cuando lo que estaba sobre la mesa el sábado eran unos 3.500 millones. Consideró que si la economía evoluciona como se espera en 2010 y se supera la crisis, podría hablarse incluso de 5.000 millones.
Los cálculos surgieron de un aumento de hasta 435 millones de la partida de los Mossos y las prisiones, del incremento de los fondos de normalización lingüística, de más subvenciones para el transporte público y de la ampliación del convenio de Cercanías. Todo ello, "gracias a la negociación de ERC". El déficit fiscal pasa de 15.000 a 5.000 millones de euros, y la aportación con cargo al fondo de garantía (1.181 millones) queda "compensada" con lo que recibe Catalunya del fondo de competitividad (1.247 millones).
Los cambios en el Gobierno de Zapatero, sustituyendo a Pedro Solbes --"un cajero incómodo"-- por Elena Salgado, influyeron de forma positiva, así como la necesidad del Ejecutivo central de asegurar apoyos parlamentarios. Para Ridao, el debate de la financiación catalana, lleno de "fatiga", consigue que en el primer año de vigencia haya más recursos del anterior acuerdo de CiU y PP en seis años.
En cuanto a las declaraciones de Miquel Iceta (PSC) y el conseller de Interior, Joan Saura (ICV), sobre la reedición del tripartito, Ridao dijo que ya hay suficiente trabajo con el acuerdo de financiación y ejecutar el Pacte d'Entesa. "Tenemos un acuerdo político para toda la legislatura. Somos serios y haremos los deberes hasta final de curso", indicó, sin aventurarse a hablar de pactos para otras legislaturas.
Replicó a Iceta --que criticó que ERC se ponga medallas en la financiación--, que si bien el conseller de Economía, Antoni Castells, lideró el proceso, ERC pidió línea directa con Zapatero. Recomendó evitar "celos políticos" sobre quién ha tenido más incidencia.
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