El Fiscal de Sevilla mantiene los cinco años para el acusado de difundir pornografía infantil en Internet

Actualizado: lunes, 9 julio 2007 17:04

SEVILLA, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Sevilla ha mantenido los cinco años de prisión que solicitaba para el acusado de un delito de distribución de material pornográfico de menores por descargarse y difundir diversas escenas de carácter sexual protagonizadas por menores de 13 años, quien ha asegurado que desconocía que tener este tipo de imágenes era delito.

En el transcurso del juicio, celebrado hoy en la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Sevilla y que ha quedado visto para sentencia, el procesado señaló que no distribuía imágenes en la red, si bien reconoció que poseía material de contenido sexual, "pero no sabía que tenerlo era delito". Así, explicó que en muchas ocasiones dejaba el ordenador bajando imágenes "durante dos y tres días, sin saber lo que podía descargarse".

Por su parte, los testigos han corroborado que en el registro efectuado en la vivienda del acusado encontraron "dos ordenadores y CD y DVD con archivos de pornografía infantil" que fueron requisados y analizados en Madrid.

De igual modo, el jefe de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, explicó que la detención del procesado se llevó a cabo dentro de una operación desarrollada durante 2005 "basada en un programa informático, denominado Híspalis, que detecta las descargas que se realizan en Internet". Así, dijo que comenzaron a localizar las direcciones de aquellos ordenadores en las que se habían producido más de cinco descargas durante varios días "para evitar los casos que se producen por descargas accidentales".

De esta forma, el Ministerio Público, que ha estado representado por la propia fiscal jefe --María José Segarra--, el procesado es "responsable de un delito de distribución y no sólo de tenencia de pornografía infantil" porque en uno de sus ordenadores le encontraron imágenes de este tipo en una carpeta a la que pueden acceder todos los usuarios del programa de descargas en la red Emule.

Además, explicó que este programa es común entre los usuarios de la red "y, por tanto, no era ajeno su funcionamiento a alguien que estaba acostumbrado a bajarse archivos en Internet", ya que este programa descarga directamente a una carpeta a cuyos archivos, si no son trasladados a otra, puede acceder todos los usuarios del mismo.

La fiscal justificó de esta forma la agravante de la pena, ya que en el caso de que sólo fuera tenencia de este material oscilaría entre tres meses y un año de prisión, añadiendo también que asciende al tratarse de menores de trece años los que aparecían en las fotografías, "para lo que no hace falta hacer un estudio, sólo con ver los niños se saben que no superan los trece años".

NULIDAD DE LAS ACTUACIONES

Por su parte, la defensa ha reclamado la libre absolución del acusado reclamando además, la nulidad de las actuaciones, pues considera que en la investigación la Guardia Civil vulneró el derecho a la intimidad del acusado "porque no sólo se intervino por medio de un programa la descarga entre dos usuarios de la red, sino que se visualizó el contenido sin autorización judicial", sin embargo, la fiscal se ha opuesto por considerar que la conexión "se estaba realizando en un medio público".

Asimismo, el letrado ha solicitado alternativamente una pena de cuatro meses por poseer imágenes pornográfica, ya que consideró "que sólo ha quedado acreditado que poseía este tipo de material, pero no que los distribuía por Internet". En este sentido, dijo que le parecía "desproporcionada" la pena reclamada por el Ministerio Fiscal, asegurando que era más propia "para los que han protagonizado y realizado esas imágenes, que son a los que se deben buscar".

De igual modo, el abogado indicó que, basándose en el interrogatorio como testigo del jefe del Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil, que "en el momento que se hace una descarga en Internet, el archivo se comparte y pueden acceder a él otros usuarios", alegando así, que "no queda probado que el acusado mantuviera los archivos para compartir o si fue en el momento de sus descargas cuando accedieron a ellos otros usuarios".

LOS HECHOS

Según consta en el escrito de acusación provisional del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, los hechos tuvieron lugar en fechas no determinadas pero anteriores al 21 de febrero de 2006 cundo el acusado, sin antecedentes penales, empleando un programa para descargas en Internet, bajó a su ordenador una gran cantidad de archivos, entre los que "figuran diversas escenas de contenido sexual explícito en la que intervienen menores de 13 años".

Los citados archivos una vez descargados de la red pasaban a incorporarse de nuevo a la misma desde el ordenador del acusado, "al que otros usuarios podían a su vez acceder y descargarse los archivos para su propio uso".

Así, el 21 de febrero de 2006, agentes de la Guardia Civil practicaron un registro en el domicilio del procesado en el que examinaron el disco duro de su ordenador, encontrando cientos de archivos con carácter pornográfico, así como varios discos compactos con una cantidad similar de material de este tipo.