BARCELONA, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía solicitó hoy que se mantenga en prisión provisional hasta la celebración del juicio a Ricard P.B. y Oriol P.S., los dos jóvenes acusados de vejar y quemar viva a la indigente María Rosario E.P. en un cajero automático del barrio barcelonés de Sant Gervasi a finales de 2005. Por estos hechos ya fue condenado a ocho años de internamiento en régimen cerrado el menor de edad que participó en el crimen junto a los dos procesados.
Ricard P.B. y Oriol P.S. salieron hoy de la prisión de jóvenes de la Trinitat, donde permanecen desde el 21 de diciembre de 2005, para estar presentes en la vista de prórroga de prisión celebrada a puerta cerrada en la Sección Décima de la Audiencia de Barcelona. Los acusados entraron en la sala custodiados por los Mossos d'Esquadra y ocultando su rostro bajo sendas chaquetas para evitar que se les tomase fotografías o se les grabase.
Durante la vista, la Fiscalía, la acusación particular --ejercida por la familia de María Rosario E.P. y por 'La Caixa'-- y la acusación popular --ejercida por el Ayuntamiento de Barcelona-- solicitaron que se mantenga en prisión preventiva a Ricard P.B. y Oriol P.S. hasta que sean juzgados por los delitos de asesinato y de daños por los que fueron procesados, situación que puede alargarse como máximo otros dos años. Las defensas, por su parte, pidieron su puesta en libertad provisional.
Según el abogado que representa a la familia, Lluís Costa, ante un hecho "grave" como es la muerte de una persona, "la sociedad no entendería que se les dejase en libertad antes del juicio". El letrado consideró, además, que existe un riesgo de fuga "elevado", ya que "son personas de 20 años" y se enfrentan a una pena de hasta 25 años por un delito de asesinato. Por todo ello y porque "la alarma social continúa vigente", Costa considera que "lo lógico es que sigan en prisión".
Por otra parte, la Sección Décima ha admitido a trámite la recusación que la defensa de Ricard P.B. ha formulado contra los cinco magistrados de la Sala presidida por Josep Maria Pijuan. Para el letrado Juan Antonio del Moral, su imparcialidad está comprometida, ya que, en su opinión, han prejuzgado la culpabilidad de los acusados al resolver los recursos que se han planteado. A falta de que se resuelva la recusación, cabe la posibilidad de que Ricard P.B. y Oriol P.S. no sean juzgados por los magistrados de la Sección Décima.
Por la muerte de María Rosario E.P., de 50 años, ya fue condenado el único acusado menor de edad, J.J.M.R., quien permanece en el centro de internamiento para jóvenes Els Til·lers, en Mollet del Vallès (Barcelona), después de que la juez de Menores número 6 de Barcelona le condenase en abril de 2006 a ocho años de internamiento en régimen cerrado y a cinco más de libertad vigilada por un delito de asesinato y otro de daños.
QUEMADURAS EN EL 70% DE SU CUERPO.
La agresión se inició pasada la una de la madrugada del 16 de diciembre de 2005, cuando Ricard P.B. y Oriol P.S. entraron en el cajero de una oficina de 'La Caixa' del barrio de Sant Gervasi para increpar a María Rosario E.P., que se disponía a pasar allí la noche. Según la grabación de la cámara de seguridad, los jóvenes lanzaron varios objetos contra la mujer, entre ellos, una naranja, una botella de plástico y un cono de señalización.
La víctima, no obstante, consiguió echarles y cerró la puerta de acceso al cajero. Fue sobre las 4.20 horas cuando el menor J.J.M.R., que entonces tenía 16 años, consiguió que la víctima retirara el cerrojo de la puerta y le facilitara la entrada, simulando que deseaba efectuar una operación y aprovechando que la mujer no le conocía.
A continuación, los tres jóvenes supuestamente entraron dos veces más en la entidad, portando J.J.M.R. en una de las ocasiones un tubo cilíndrico de color marrón con el que golpeó a la indigente. Ya sobre las cinco de la madrugada, los tres jóvenes se dirigieron de nuevo al cajero con un bidón de disolvente que habían cogido de las obras de restauración de la fachada que se estaban realizando en el inmueble.
Una vez allí, mientras Oriol P.S. sujetaba la puerta manteniendo una actitud vigilante, J.J.M.R. y Ricard P.B. presuntamente entraron en el interior, derramaron el disolvente sobre María Rosario E.P. y le prendieron fuego con un cigarrillo, produciéndose una potente deflagración que se extendió a las instalaciones del cajero.
La víctima murió poco después en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona tras una larga agonía producida por las graves lesiones padecidas. María Rosario E.P. sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el 70% de su cuerpo y tenía la cara carbonizada.
