MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta del Foro de Ermua, Inma Castilla de Cortázar, dijo hoy que es "de risa" que el 'lehendakari', Juan José Ibarretxe, apele a la experiencia de Irlanda para decidir el futuro del País Vasco y recordó que los británicos "suspendieron en sucesivas ocasiones" el gobierno autonómico de Irlanda.
En declaraciones a Europa Press, Castilla de Cortázar criticó que el hecho de que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el 'lehendakari' hayan estado dos horas reunidos "para semejante despropósito" parecería "cómico sino fuera lamentable". "Recurrir a los británicos es no tener ni idea de política", subrayó.
"Lo que han hecho los británicos es por lo menos suspender en sucesivas ocasiones el gobierno autonómico por lo menos en un total de cuatro años", explicó tras recordar que ésta es la vía que recoge el artículo 155 de la Constitución española. "Que quiera un acuerdo a la inglesa es como de risa, es suspender el gobierno autonómico, eso es lo que han hecho los ingleses", insistió.
OPERACIÓN ELECTORALISTA.
A su juicio, ahora existe una "operación electoralista" que pretende presentar a Zapatero como un "hombre de Estado", pero defendió al jefe del Ejecutivo "le falta credibilidad para ser capaz de frenar cualquier tipo de pretensión nacionalista". Para ella, "ni tiene firmeza, ni condiciones ni probablemente no tiene voluntad de hacerlo"
Así, aunque reconoció que las palabras de Zapatero tras su reunión con Ibarretxe fueron "absolutamente correctas", apeló a su experiencia e indicó que el nacionalismo vasco "es el gran teatro del mundo en el que se reparte magníficamente los papeles". "Tenemos las elecciones cerquita", argumentó.
En este contexto, defendió que el censo vasco se encuentra "totalmente diezmado" por la acción de la organización terrorista y del nacionalismo y criticó que todas las consultas electorales del País Vasco de los últimos años han sido "profundamente antidemocráticas".
Sin embargo, Castilla de Cortázar enfatizó que el Foro de Ermua tiene "muchas esperanzas" en que tras las próximas elecciones gobierno "un frente constitucionalista" liderado por el PP que emprenda una reforma de la Carta Magna "en toda su profundidad" y que "permita que en este país no estemos mangoneados por los nacionalistas".
"Los nacionalismos serían como un cuento de niños si hubiera un constitucionalismo firme, si el Estado fuera más serio", subrayó tras insistir en la necesidad de un frente constitucionalista que corte "absolutamente todos estos órdagos nacionalistas que no tienen sentido".
