MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
Una veintena de concejales vascos visitaron hoy la Casa de la Villa y pudieron conocer, de boca del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, algunas de las curiosidades de la sede de la soberanía madrileña, así como de las obras de arte que conserva, acompañados también por una guía del Patronato de Turismo.
La delegación, encabezada por el secretario general del PP vasco, Ignacio Oyarzabal, ante la ausencia a última hora del presidente 'popular', Antonio Basagoiti, con motivo de la liberación del barco pesquero Alakrana, visitó las diferentes estancias públicas de la Casa de la Villa, desde su magnífica escalera de entrada hasta el Salón de Plenos.
Así, pudieron disfrutar de la estatua original de la Mariblanca, cuya copia se encuentra desde hace unas semanas en la remozada Puerta del Sol; los tapices flamencos del siglo XVII, basados en cartones de Pedro Pablo Rubens; la custodia de plata, el crucifijo, la araña de cristal de La Granja o los diferentes retratos de reyes y alcaldes, y cuadros que jalonan las paredes del edificio.
Además, también visitaron el Salón de Plenos, el Salón Goya y el Patio de Cristales, donde Gallardón les explicó que este nombre no se debe a la maravillosa vidriera que hace de cubierta, sino al primer suelo que se construyó, en el que las vigas podían verse a través de las losetas de cristal.
BROMAS Y ANÉCDOTAS
Entre las curiosidades que el primer edil madrileño explicó a sus invitados, destaca por ejemplo la tradición de que en los plenos municipales se cuente siempre con dos sillones vacíos en la Presidencia, "por si los Reyes deciden presentarse un día". Además, el retrato de don Juan Carlos que preside la sala se pintó cuando el monarca se convirtió en Hijo Adoptivo de la capital.
"Dicen que cuando la Reina doña Sofía vio el cuadro dijo que le gustaba y que veía viejo al Rey. Cuando éste le contestó: 'No, yo lo veo muy bien', doña Sofía le replicó: 'No, no, en el retrato no (es donde te veo viejo)'", relató la guía, despertando las risas de los presentes.
También sorprendió a los ediles vascos la disposición de las bancadas, más similar al Parlamento británico que a un hemiciclo tradicional, y el alcalde les explicó que en Reino Unido la distancia entre los escaños de uno y otro partido en la Cámara de los Comunes mide "exactamente lo que dos espadas más un centímetro", porque estando todo permitido en el debate excepto cambiar de bancada, eso garantizaba que no hubiera agresiones violentas.
Además, en este punto de la visita, que se prolongó durante casi una hora, Gallardón también explicó someramente el funcionamiento de las sesiones plenarias, y aludió a las "conversaciones" actuales para, en virtud de la Ley de Capitalidad, "parlamentarizar" más los plenos, en el sentido de que el presidente no sea el jefe del Ejecutivo y que el primer edil se someta al control de la oposición, algo que actualmente no es así.
Para cerarr la visita, los invitados pudieron visitar la 'joya de la Corona', la capilla encargada por Carlos II en el siglo XVII y que "en los años 80 era el despacho de los 22 concejales de la oposición", en aquel momento, el PP. "Yo creo que don Enrique (Tierno Galván) debió de pensar que como José María (Álvarez del Manzano) era democristiano, estaría a gusto aquí", bromeó Gallardón.
Desde luego, los frescos que decoran todas las paredes y la bóveda, representando imágenes de los santos madrileños y del tema más recurrente de la época, la Inmaculada Concepción son más que destacables.
"ESTAMOS ENCANTADOS"
Al finalizar la visita, y antes de dirigirse a la comida con sus compañeros de partido, Oyarzabal indicó a la prensa que "todo el mundo está encantado, muy contento y muy agradecido por tener la oportunidad de conocer esos sitios de Madrid donde no se tienen acceso cuando se viene de manera particular", y explicó que "a Gallardón se le aprecia mucho en el País Vasco".
Además, indicó que para los concejales desplazados hasta la capital, muchos provenientes de municipios muy pequeños donde el Grupo Popular tiene uno o dos ediles, Madrid "representa la libertad, otra manera de entender la política y el respeto a las ideas de los demás".
"La mayoría de los que hemos venido somos personas que llevamos con escolta desde que nos levantamos hasta que nos acostamos desde hace doce años o más. Están en municipios muy complicados, donde ejercen su labor en circunstancias muy difíciles, lo que demuestra que están en la actividad política defendiendo unas ideas y arriesgándolo todo por eso", continuó el líder vasco.
Finalmente, valoró "positivamente" los meses de Gobierno socialista en la región, y concedió que "algunas cosas están cambiando" desde las últimas elecciones autonómicas, aunque "hasta ahora no se puede percibir una rebaja en la presión en la calle, que sigue estando, y no sólo de radicales sino también de nacionalistas que, muchas veces, hace el ambiente irrespirable".
"Creemos que algunas cosas están cambiando y lo que hacemos allí desde el PP es apoyar esta nueva etapa con responsabilidad, porque creemos que se puede dar un cambio en la buena dirección", concluyó.