Garzón deja en libertad a Joseba Imanol Elosúa, acusado de integrar la red de extorsión de ETA, por su precaria salud

Actualizado: martes, 6 marzo 2007 17:09

Su permanencia en prisión supone "un riesgo vital a corto plazo", según los forenses de los juzgados de San Sebastián

MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha decretado la libertad provisional por su precario estado de salud de Joseba Imanol Elosúa, propietario del bar "El Faisán" de Irún (Guipúzcoa) y presuntamente responsable del aparato de extorsión de ETA, quien se encontraba en prisión desde el pasado 24 de junio por orden del juez Fernando Grande-Marlaska.

La puesta en libertad de Elosúa se produjo el pasado 13 de febrero, según la información difundida hoy por la Audiencia Nacional. Garzón acordó la medida tras conocer los informes de dos forenses que acudieron a la prisión de Martutene (San Sebastián) para explorar a Elosúa, quien sufre un cáncer de próstata que se ha complicado con una dolencia cardiaca, razón por la que había sufrido tres episodios sincopales en la cárcel, con pérdida de conocimiento y caída al suelo.

Según el fax remitido por los forenses el mismo día 13 desde los Juzgados de Instrucción de San Sebastián, las enfermedades que aquejan a Elosúa "suponen un riesgo vital a corto plazo" y la estancia en prisión "dificulta un tratamiento adecuado más allá del influjo psíquico y emocional de la dolencia".

MEDIDAS CAUTELARES.

Tras conocer dichos informes, instados por la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Garzón dictó un auto reformando el de prisión suscrito en junio por Grande-Marlaska, quien le sustituía en el Juzgado Central de Instrucción número 5 mientras él disfrutaba de un permiso de estudios en Estados Unidos.

En él impone a Elosúa la prohibición de salir de España y le obliga a comparecer quincenalmente en el Juzgado más cercano a su domicilio, salvo en el caso de que no pudiera acudir por su estado de salud, una circunstancia que deberá ser justificada por sus familiares. Además, señala que deberá comunicarse a su Juzgado cualquier circunstancia por persona de su entorno familiar, quien a su vez deberá informar sobre la evolución de su estado.

En la motivación de la decisión se recoge expresamente que, dado el estado precario de salud de Elosúa, "parece razonable suponer la no elusión a la acción de la justicia", lo que constituye un "serio argumento" para acordar la libertad provisional.

En una cronología facilitada hoy por el Juzgado, se señala que el Centro Penitenciario de Martutene informó por fax a Garzón el pasado 5 de febrero de los tres "episodios sincopales" sufridos por Elosúa, de los que tardó en recuperarse entre 30 y 60 minutos.

Al tumor prostático que ya padecía con anterioridad a su detención, Elosúa añadía una antigua dolencia de tipo cardiaco agravada ahora con una "fibrilación auricular paroxística y posible fibrosis de cara posterior", por lo que comenzó un tratamiento con anticoagulantes.

AMBIENTE CERRADO Y ESTRESANTE.

El servicio médico de la prisión informaba en el fax remitido a la Audiencia Nacional que la estancia de Elosúa en prisión "no es beneficiosa para el buen control y seguimiento de sus enfermedades ya que, entre otras causas, los síncopes que padece le suponen un riesgo vital elevado".

En dicha comunicación se decía también que "el ambiente cerrado y estresante inherente a la prisión en general y, en este caso en particular, influye muy negativamente en las esferas psíquica, física y emocional, favoreciendo las complicaciones médicas, que en su caso ya son severas de base, y es por ello que solicitamos sea valorada por la autoridad judicial de quien dependa la posibilidad de libertad provisional por enfermedad, al encontrarse en prisión preventiva.

El 24 de junio de 2006, el fiscal de la Audiencia Nacional Juan Antonio García Jabaloy instó el ingreso en prisión de Elosúa tras tomarle declaración durante aproximadamente tres horas. En dicha ocasión, el principal imputado en España de la red de extorsión de ETA declaró "exhaustivamente" sobre su papel dentro de la red de extorsión de la organización terrorista.

En la misma operación fueron detenidas cinco personas en España y otras siete en Francia por integrar el aparato de extorsión en ambos países, en los que según las investigaciones operaban desde hace 20 años. El cometido del aparato desarticulado era la gestión y recaudación del conocido como "impuesto revolucionario", exigido a empresarios e industriales españoles en el País Vasco y Navarra.

GORKA AGUIRRE.

Los imputados en España son, además de Elosúa, Carmelo Luquín Vergara, Jean Pierre Harocarene Camio, Ramón Sagarzazu Olazaguirre e Ignacio Aristizábal Iriarte, a los que se suma el miembro de la Ejecutiva del PNV Gorka Aguirre, para quien Grande-Marlaska acordó la libertad bajo fianza de 30.000 euros como imputado en un delito de colaboración con organización terrorista. En el curso de esta investigación, Grande-Marlaska tomó declaración, como testigo, al ex presidente del EBB del PNV Xabier Arzalluz.

En Francia, fueron detenidas siete personas, entre ellas el fundador de ETA Julen Madariaga, quien quedó en libertad tras ser interrogado. El resto de arrestados en el país galo fueron Ángel Iturbe Abásolo, presunto responsable de la red, María Cristina Larrañaga Arando, Eloy Uriarte Díaz Guereñu, María Izaskun Ganchegui Arruti y José Ramón Badiola Zabaleta.