MADRID 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno decidió hoy, en la reunión semanal del Consejo de Ministros, formalizar con Hungría, a través del sistema de "canje de notas", el acuerdo para el establecimiento y funcionamiento del Instituto Cervantes en Budapest, que ya está en marcha desde septiembre de 2004.
El acuerdo regula los aspectos más importantes relativos al establecimiento y funcionamiento del centro de Budapest, incluido el reconocimiento de su plena personalidad jurídica y capacidad de obrar.
Asimismo, establece que la misión de la sede del Cervantes es divulgar en Hungría la lengua española y la cultura en español y determina el régimen de su personal, con un director y hasta cuatro subdirectores que gozarán de los privilegios e inmunidades reconocidos a los funcionarios diplomáticos si se les acredita como miembros del personal diplomático de la Misión.
El acuerdo también especifica el régimen laboral y de seguridad social del resto del personal del centro, y señala que el mismo no perseguirá fines lucrativos, pero podrá, para cubrir gastos de funcionamiento, cobrar por determinadas actividades, incluidos los cursos de lengua.
Por otra parte, estipula que el régimen fiscal aplicable será el establecido en el Convenio entre el Gobierno del Reino de España y el Gobierno de la República Popular de Hungría para evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal en materia de impuestos sobre la renta y sobre el patrimonio y su Protocolo de 9 de julio de 1984.
Asimismo, se determina que los términos de establecimiento y funcionamiento de un futuro Instituto Húngaro de Cultura en España serán objeto de un Acuerdo análogo independiente, en consonancia con la naturaleza y atribuciones de los Institutos Húngaros de Cultura.