El Gobierno del PP dice que Zapatero no tenía por que entregarle la carta confidencial del BCE que publicó en su libro

MADRID 31 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Mariano Rajoy sostiene que el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero no tenía por que entregarle la carta que el entonces presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, le envió en agosto de 2011 y cuyo contenido desveló el propio Zapatero en el libro 'El Dilema: 600 días de vértigo' que publicó el año pasado.

Esta es la respuesta que ha remitido el Gobierno a la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, quien en su momento preguntó al Ejecutivo si Zapatero había entregado la misiva a su sucesor o si en los archivos de Moncloa se encuentra el original o al menos una copia de la misma.

La polémica misiva, que llevaba también la firma del exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez y era "estrictamente confidencial", llegó a su destinatario pocos días antes de que Zapatero pactara con Rajoy la reforma de la Constitución para poner un tope al déficit público. En ella el presidente del BCE reclamaba la aprobación de medidas urgentes para devolver "la credibilidad de la firma soberana a los mercados de capitales".

LEALTAD INSTITUCIONAL

En su contestación, a la que ha tenido acceso Europa Press, el Ejecutivo explica que el traspaso de funciones supone la puesta en conocimiento del nuevo Gobierno, por parte del anterior, "de las principales cuestiones que afectan a la función ejecutiva y a la marcha del país, de acuerdo con un principio de lealtad institucional". Pero, según subraya, eso "no implica necesariamente la entrega o recepción de documentos específicos".

Además, apunta que, "en atención a su naturaleza o contenido" esos documentos "obrarán, en su caso, en el archivo correspondiente y quedarán sujetos a la vigente legislación en materia de custodia, acceso e información pública".

Es decir, el Gobierno imagina que la polémica carta estará en el archivo que corresponda, aunque no lo da por hecho, y tampoco responde a otra de las preguntas de Díez, que quería saber si el Ejecutivo estaba dispuesto a "depurar las convenientes responsabilidades administrativas, patrimoniales o incluso penales si las hubiera, en el caso de que la misiva no esté convenientemente archivada".