VITORIA, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Gobierno vasco, Miren Azkarate, apostó hoy por "el diálogo y la decisión libre y democrática de esta sociedad" frente a la vuelta de ETA "a un pasado de muerte y terror" tras el atentado del pasado sábado en Francia. Además, dentro de la misma declaración formal, leída tras el Consejo de Gobierno semanal, denunció la "politización de la Justicia" que, a su juicio, subyace tras el caso del macrosumario 18/98 y el encausamiento del lehendakari, Juan José Ibarretxe, por reunirse con Batasuna.
La portavoz del tripartito leyó una declaración en la que, con el encabezamiento de 'Manifestación de criterio del Gobierno', se fija la posición política del gabinete de Ibarretxe ante el atentado de ETA, el caso 18/98 contra el entorno político de la banda y la decisión del Tribunal Supremo sobre el caso 'Botín', que puede suponer el archivo de la causa contra el lehendakari.
Azkarate expresó su "más absoluto rechazo a ETA" y aseguró que "la violencia es solamente violencia, y no hay fin político alguno que pueda justificar el asesinato". "ETA no tiene otro camino que renunciar a la violencia, y quienes representan a la sociedad tienen el deber de sentarse en una mesa para buscar soluciones hablando y dialogando", añadió.
En su opinión, "exista o no ETA, es necesaria la normalización política y son necesarios los acuerdos políticos". Asimismo, indicó que se produzcan o no estos acuerdos "la violencia de ETA tiene que desaparecer".
Azkarate denunció que ETA ha vuelto a "un pasado de muerte y terror" con el asesinato del guardia civil Raúl Centeno y con las graves heridas causadas a su compañero Fernando Trapero. Así, "frente a quienes solamente nos ofrecen un espacio del pasado, sin salidas ni soluciones", aseguró que el tripartito "va a seguir liderando una alternativa de esperanza basada en el diálogo y en la decisión libre y democrática de esta sociedad".
"INICIATIVA POLITICA"
La portavoz del Gobierno consideró que "hoy más que nunca, es necesario tener iniciativa política, y este Gobierno la tiene y la va a seguir teniendo y ejerciendo".
En su declaración, Azkarate destacó la importancia de "no mezclar la defensa de los principios éticos con la defensa de los principios democráticos". A su juicio, estos términos se han mezclado "en demasiadas ocasiones", lo que hace que "continuamente estemos dando vueltas en espiral sobre el mismo punto".
Tras la condena de la acción terrorista del pasado sábado, la declaración leída por la portavoz del tripartito incluye una reflexión acerca de la "politización de la justicia" que, en su opinión, subyace tras el caso del 18/98 y el encausamiento de Ibarretxe, Juan José Ibarretxe, y los dirigentes socialistas Patxi López y Rodolfo Ares por reunirse con Batasuna.
"El caso 18/98 ha vuelto a dejar de manifiesto la politización de los estamentos judiciales", denunció, para a continuación asegurar que esa "politización" del Poder Judicial fue "iniciada en la era Aznar, y continuada por el PSOE".
Azkarate recordó que el ministró del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "anunció públicamente el contenido de la sentencia antes de conocerse y antes de que los acusados hubieran conocido el fallo del tribunal contra ellos".
Además, criticó que la presidenta del tribunal encargado del juicio contra el entorno político de ETA "afirmó sin mayores problemas que había algunas pruebas documentales del proceso que habían desaparecido".
"Eso sí, todo lo que no sabían las personas inculpadas lo sabían los medios de comunicación y las cámaras de televisión. ¿Cómo es posible que los medios de comunicación conozcan antes que los acusados las resoluciones judiciales que un tribunal ha adoptado contra ellos?", lamentó.
"RIGOR JURÍDICO"
En su opinión, la presente causa es "un caso de manual de los que han instrumentado la teoría de que todo es ETA y de que la acción penal no se dirige sólo contra las personas individuales, sino contra asociaciones y organizaciones sociales o políticas".
La portavoz del tripartito reclamó "una Justicia independiente que investigue los delitos de terrorismo y de pertenencia a banda armada, pero desde el rigor jurídico y el respeto a la tutela efectiva de los derechos individuales y colectivos de las personas". Por ese motivo, insistió en que "ilegalizar las ideas no es la solución".
"PAREDÓN"
Respecto a las supuestas afirmaciones realizadas por el representante de Askatasuna, Julen Larrinaga, que aseguró que Rubalcaba iba a acabar "en el paredón", pidió "serenidad".
"Ha habido portavoces del caso 18/98 que este fin de semana han dado muestras de defender con mucha energía los derechos de algunas personas, y hemos visto que se han callado ante la vulneración de un derecho tan fundamental como es el derecho a la vida. ¡No se puede mandar a nadie al paredón!", afirmó.
Azkarate afirmó que el caso 18/98 "es una injusticia", pero advirtió de que el Gobierno "no compartirá esta posición con quienes nos insultan gravemente culpándonos a nosotros de su situación".
Respecto al 'caso Ibarretxe', explicó que "el propio lehendakari es víctima" de la supuesta politización de la Justicia. En opinión de Azkarate, la decisión del Tribunal Supremo sobre el 'caso Botín' "deja en evidencia los impulsos políticos con los que han actuado hasta ahora algunos jueces y magistrados en el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco".