Incendio.- El fuego en la sede del Obispado pudo deberse a un cortocircuito, según el presidente de Canarias

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

La causa del incendio que se produjo esta mañana en el edificio del Obispado de Tenerife, ubidado en La Laguna, pudo ser un cortocircuito, según declaró presidente de Canarias, Adan Martín, quien informó que las llamas han llegado ya a la Universidad Nacional de Educación a Distancia, edificio cercano al Obispado.

La alcaldesa de La Laguna, Ana Oramas, dió hoy por perdido el edificio que alberga la sede del obispado de Tenerife en el que se originó esta mañana un incendio por causas que aún se desconocen. El edificio, fue declarado Patrimonio de la Humanidad en diciembre de 1999. Medios aéreos participan en la extinción del fuego, aunque no se han registrado daños personales.

El incendio sigue sin ser controlado y, a primera hora de la tarde, se han incorporado al operativo de extinción dos helicópteros, además de los más de 50 bomberos que ya se encontraban trabajando para apagar las llamas. Cuentan con nueve bombas urbanas pesadas, dos autoescalas y tres vehículos nodriza, según informan fuentes del Cabildo de Tenerife.

La Casa de Salazar, como se conoce al edificio del obispado, data del siglo XVII, forma parte del conjunto histórico considerado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. El edificio está situado en la calle San Agustín de La Laguna, en la isla de Tenerife, y su estructura de madera complica la extinción del incendio.

SE ORIGINÓ EN LA BIBLIOTECA

El fuego se originó hacia las 12.00 horas de hoy en la biblioteca de la segunda planta del edificio, en la zona donde se encuentra la residencia privada del obispo Bernardo Álvarez. Aunque en una sala cercana, estaban reunidos los vicarios, no se han producido daños personales.

Según declaró el presidente de Canarias, Adan Martín, la causa más probable del incendio es un cortocircuito. Martín informó que las llamas han llegado ya a la Universidad Nacional de Educación a Distancia, edificio cercano al Obispado.

De momento, parece difícil cuantificar las pérdidas económicas. En este sentido, el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, que se desplazó hasta La Laguna, dijo que "hay cosas que no tienen precio".