MADRID 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio del Interior se ha puesto en contacto con el contingente de guardias civiles destinados en Nuadibú, la ciudad costera, segunda en importancia de Mauritania, y ha constatado "normalidad" en su situación, después del golpe de Estado que sufre el país desde esta mañana, informaron a Europa Press fuentes del departamento que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba.
En todo caso, Interior mantiene abierta una línea permanente de contacto con el contingente de Guardia Civil, la embajada en Nouakchot y el Ministerio de Asuntos Exteriores, precisaron las fuentes consultadas. De la seguridad de la embajada, que por el momento no se ha visto afectada por el golpe de Estado, se encarga un grupo de agentes del Cuerpo Nacional de Policía.
En estos momentos hay destacados en Nuadibú alrededor de 25 agentes del Instituto Armado en funciones de vigilancia de las costas mauritanas para prevenir la salidad de cayucos. La mayoría prestan servicio a bordo de la Patrullera Río Duero y un grupo más reducido lo hacen pilotando un helicóptero que sobrevuela la zona para divisar las embarcaciones que ponen rumbo a Canarias.
Los agentes españoles, destacados desde 2006, realizan patrullas conjuntas con los gendarmes mauritanos, algunos de ellos han llegado a viajar a España para recibir formación. Además, España ha aportado medios materiales para mejorar la situación en la que realiza su trabajo la Gendarmería mauritana, entre ellos cuatro patrulleras, tres todoterrenos, un autobús y 25 ordenadores.