El juez retira el arma al mosso que disparó a un hombre en una perrera de Barcelona hasta que termine el caso

BARCELONA 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

El juez que lleva el caso del mosso d'Esquadra que disparó a un hombre en la perrera municipal de Barcelona ha inhabilitado al cabo para llevar el arma reglamentaria mientras dure el proceso judicial, como pidió el abogado del rumano herido.

Según el auto del titular del Juzgado de Instrucción número 22 de Barcelona, con fecha del sábado, el cabo tendrá que entregar su arma y la guía correspondiente al servicio de armas de los Mossos, ya que existen "motivos plausibles de imputación" por una falta o un delito de lesiones y "la legítima defensa --que alega el mosso-- no se impone como una evidencia".

El viernes, los tres empleados de la perrera agredidos por Mihaita B., que el día 8 recibió dos tiros de un mosso d'Esquadra que intentaba reducirle, confirmaron ante el juez que el agente disparó al verse acorralado, ya que el agresor le amenazaba con una pala con la que previamente había golpeado a su compañero de patrulla.

También declaró el mosso herido por Mihaita B., como testigo, y el cabo, como imputado, quien mantuvo que actuó en defensa propia al ver que Mihaita B. tenía intención de agredirle, según informaron a Europa Press fuentes judiciales.

Los trabajadores José C.M., Lino R.A. y Eladio A.D. relataron que Mihaita B. accedió al Centro de Acogida de Animales de Compañía (CAAC) hacia las 7.45 horas --cuando los primeros empleados en llegar abrieron sus puertas--, mostrando una actitud agresiva. De hecho, se dirigió a José C.M. y, según el empleado, le propinó un puñetazo sin mediar palabra.

Mihaita B., además, lanzaba piedras a los trabajadores que esperaban en el exterior del recinto, y provocó daños en los coches de Lino R.A. y Eladio A.D. y en las instalaciones de la perrera. Ante la actitud que mostraba el hombre, los empleados decidieron finalmente avisar a los Mossos d'Esquadra.

Cuando llegaron los agentes, según su versión, Mihaita B. se había hecho con unas cadenas y había cogido una pala con la que les amenazó, por lo que trataron de calmarle. El detenido, sin embargo, alcanzó a uno de los policías en un brazo, causándole un hematoma, y le hizo caer al suelo. El cabo se sintió entonces amenazado y efectuó un disparo que alcanzó al herido, aunque no consiguió reducirle.

El imputado mantuvo que Mihaita B. siguió avanzando en actitud amenazadora y que, al verse acorralado, efectuó un segundo disparo con su arma reglamentaria en defensa propia. El presunto agresor sufrió heridas por arma de fuego en brazo, abdomen y glúteo, y tuvo que ser ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona.

Las citadas fuentes judiciales explicaron que el herido ya declaró en el juzgado, donde aseguró que no recordaba nada de lo ocurrido. Mihaita B., sin embargo, compareció como víctima y como imputado, ya que puede ser responsable de dos faltas de lesiones, tres faltas de daños y una falta contra el orden público --o un delito de atentado-- por la presunta agresión a los trabajadores y al agente.