ALMERÍA 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero de Educación de la Junta de Andalucía, Sebastián Cano, descartó hoy que el Gobierno autonómico se persone en el caso del alumno de 14 años del Instituto de Educación Secundaria 'La Paz', en el barrio de Rochelambert de la capital sevillana, sobre el que pesa una orden de alejamiento por dos delitos de amenazas y atentado contra un profesor de Latín.
En respuesta a preguntas de los periodistas tras presentar la oferta de programas educativos complementarios en Almería, Cano argumentó que la nueva Ley de Educación de Andalucía recoge el derecho de los profesores a disponer de asistencia jurídica y psicológica, por lo que su derecho tiene rango de ley, que ya dispone de los mecanismos para asistir al profesorado.
El responsable autonómico de Educación incidió en el "rechazo" de "toda violencia" verbal, física o "de cualquier tipo" contra el personal docente y quiso dejar "patente" y "claro" que los profesores merecen un "reconocimiento social" por la "importante labor" que desarrollan y el "modelo" que implican.
Asimismo recordó que la Consejería ha cumplido la orden de alejamiento dictada por el juez, la primera en España en este sentido, y reiteró que el menor va a ser escolarizado en otro centro, que dista al menos 500 metros del instituto donde el profesor amenazado imparte clases, pero cuyo nombre declinó precisar "por respeto".
Cano señaló que el objetivo de la Administración andaluza es ahora "reeducar" y "recuperar" al alumno una vez escolarizado e incidió en la importancia de las "medidas correctivas" y "preventivas" para evitar que se repitan situaciones similares.
El menor fue detenido el pasado 14 de febrero por las continuas amenazas que vertía sobre un docente. "Voy a por ti" o "voy a venir con toda mi pandilla de las Tres Mil Viviendas" eran algunas de las frases que el alumno dedicaba al profesor.
De esta manera, tras la agresión, la Policía puso al sujeto a disposición de la Fiscalía de Menores en la mañana del 15 de febrero, que solicitó al juzgado la puesta en marcha de una serie de medidas cautelares.
En concreto, el juzgado ha decretado la libertad vigilada del acusado, a quien se le ha impuesto una orden de alejamiento tanto del centro escolar como del profesor por una distancia de 500 metros hasta el día en el que se celebre el juicio.
A los pocos días del incidente estaba previsto la celebración de un juicio rápido, que no pudo llevarse a cabo porque el profesor estaba con crisis de ansiedad. Por su parte, fuentes del Instituto explicaron a Europa Press que el funcionario todavía está de baja por tales circunstancias.
Los hechos tuvieron lugar cuando el profesor y directivo del centro fue reclamado por un compañero porque el ahora imputado se negaba a cumplir con sus obligaciones en clase. En ese momento, el "enfurecido" joven recriminó su actitud al educador diciéndole que le iba a "abrir la cabeza con un hacha".