Memoria.- El PP pide retirar la enmienda que facilita a las iglesias librarse de la supresión de símbolos franquistas

MADRID 5 Nov. (EUROPA PRESS) -

El PP ha pedido formalmente en el Congreso la retirada de la enmienda que se introdujo en la denominada Ley de Memoria Histórica en su último debate parlamentario, relativa a crear una tercera excepción a la retirada de símbolos franquistas para facilitar que las iglesias no se vean afectadas.

EL PSOE y CiU, con la firma del PNV y Coalición Canaria, presentaron a última hora una modificación a la ley que abría la puerta a que la retirada de símbolos franquistas, y la posible anulación de subvenciones a quien no se preste a ello, no se aplique a las iglesias.

En concreto, estas cuatro formaciones pactaron una enmienda transaccional para introducir una tercera excepción a la retirada de símbolos. Si antes se eximía de cumplimiento por motivos "artísticos" y "arquitectónicos", ahora añadía también "razones artístico-religiosas", lo que toca de lleno a las iglesias.

La enmienda fue presentada ante el Pleno del Congreso, en el debate del pasado miércoles, por el ponente de CiU, Jordi Xuclá, ya que se basaba en una propuesta de los nacionalistas catalanes. La modificación se votó y salió adelante con la oposición del PP.

MARÍN NO PREGUNTÓ.

Ahora bien, para poder votarla se precisaba del consentimiento de todos los grupos parlamentarios, ya que era una enmienda transaccional presentada en el Pleno de la Cámara, y el PP argumenta en su escrito que le resultó "imposible" oponerse a la votación porque el presidente del Congreso, Manuel Marín, no llegó a preguntar a la Cámara si algún grupo se oponía a tramitar la propuesta, "como resulta habitual en estos casos".

En su escrito, al que tuvo acceso Europa Press, el portavoz del Grupo Popular, Eduardo Zaplana, asegura que "resulta evidente que es preciso dar a los grupos parlamentarios la oportunidad de oponerse a la admisión de las enmiendas, sin que pueda presumirse la conformidad por el mero hecho de que no manifiesten expresamente su oposición, si no se les da explícitamente la oportunidad de hacerlo".

Por ello, el PP exige retirar esa modificación del texto, que el Congreso ha remitido al Senado, volviendo a la redacción anterior, dónde sólo había dos excepciones: por razones artísticas y por motivos arquitectónicos.

IU-ICV FRUSTRÓ UN INTENTO PARA LIMITAR LA RETIRADA DE AYUDAS.

En aquella sesión plenaria del 31 de octubre, IU-ICV sí frustró otra enmienda pactada por el PSOE y los nacionalistas catalanes, vascos y canarios, pues avisó a los proponentes de que no iba a dar su consentimiento a que se votara.

En concreto, estas cuatro formaciones habían pactado otra modificación al artículo 15 de la ley para limitar el alcance de la retirada de subvenciones prevista para quien se niegue a quitar símbolos franquistas. Su idea es que sólo se pudiesen retirar aquellas subvenciones o ayudas públicas "relacionadas con el patrimonio donde estén ubicados dichos símbolos".

Si el PSOE y los nacionalistas insisten en modificar este punto, tendrán que hacerlo en el Senado y eso obligaría a que la Ley de Memoria Histórica fuera objeto de un segundo debate en el Pleno del Congreso para ratificar el cambio, un regreso que los socialistas no desean.