Obiang quiere a Zapatero en Guinea antes de fin de año

Obiang recibe a Moratinos
Oficina de Prensa de Guinea Ecuatorial
Actualizado: sábado, 11 julio 2009 1:55


BATA (GUINEA ECUATORIAL), 10 Jul. (EUROPA PRESS/Beatriz Fernández) -

El presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, invitó este viernes al jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, a que visite la ex colonia española "antes de finales de año" porque está "mal" y es "absurdo" que haya viajado antes a otros países anglófonos y francófonos como Nigeria y Togo y no conozca aún la única nación de habla hispana de África.

Obiang concedió en la capital económica del país, Bata, en la región continental, una inusual rueda de prensa para los medios de comunicación españoles que han acompañado al ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, en su tercera visita a la República africana.

Durante casi una hora de comparecencia, Obiang señaló que le ha pedido a Moratinos que le traslade la invitación a Zapatero y confió en que cuando esta visita finalmente se produzca el presidente español "traiga bonanzas" y destacó los "grandes esfuerzos" que está haciendo el jefe del Ejecutivo en Iberoamérica y Africa del norte.

ELECCIONES EN 2009 O PRINCIPIOS DE 2010

Obiang, en el poder desde el golpe de Estado que derrocó a su tío en 1979, ha avanzado que las próximas elecciones presidenciales tendrán lugar entre finales de este año y principios del siguiente y ha negado que él pretenda aferrarse al poder, pero señaló que si su partido le elige como candidato, él no va a renunciar sólo por llevar mucho tiempo en el poder porque él significa "un símbolo de estabilidad en este país y de desarrollo".

En referencia a los próximos comicios, se mostró favorable a conceder visados a la prensa española para que acuda a cubrirlos y explicó que en las pasadas elecciones estos visados no se concedieron en represalia por el malestar que causó en el pueblo ecuatoguineano el tratamiento que recibió en los medios de comunicación españoles y ciertos sectores políticos su última visita a España en 2006, en la que a última hora se canceló una visita suya al Congreso.

Bajo su punto de vista, la prensa española ha jugado un papel "negativo" en favor de las relaciones bilaterales entre España y Guinea y ha jugado "sucio", por lo que a partir de ahora esperó que desempeñen "un rol positivo" porque, señaló, "si no no sé qué va a pasar".

BLANQUEO DE DINERO

También rechazó las acusaciones que pesan sobre él y su entorno sobre blanqueo de dinero y señaló que no está preocupado por las investigaciones que se han abierto en la materia en España y Francia. "No tengo necesidad de utilizar dinero para abusos u otros intereses ni necesidad de que mi dinero se vaya fuera. Quizá podría tener unos mínimos abusos en el país, quizá, pero tener dinero fuera no me interesa", indicó Obiang, que cifró su capital en no menos de 2 billones de la moneda local.

Preguntado por las bolsas de pobreza en su país y la ausencia de una clase media a pesar de los ingresos millonarios del país por el petróleo, se mostró en contra de repartir entre la población el dinero que ingresa el Gobierno procedente del petróleo como si fueran "regalos" y defendió la inversión de los recursos en "programas" de forma "progresiva" para que la prosperidad llegue a la población "poco a poco".

A pesar de que fuentes humanitarias advierten de que el 60 por ciento de la población vive con menos de un dólar al día, defendió que sus ciudadanos viven "muy bien" y arremetió contra los "holgazanes" que no quieren trabajar.

Aunque las estimaciones sobre la tasa de paro alcanzan al 30 por ciento de la población activa, Obiang negó tener un problema de desempleo en su país y se refirió al "desinterés" general de la población en trabajar a pesar de que las más de 800 empresas instaladas en el país precisan de mano de obra y se ven obligadas a importar empleados extranjeros. Obiang también habló de su sucesión para indicar que no hay nada que prohíba que alguno de sus hijos pueda ser ministro o sucederle porque, según él, será el pueblo quien elija a sus mejores dirigentes. También dijo presumir de que le llamen dictador porque es aquel que "dicta las normas".

Sobre la ausencia española en estos 40 años en Guinea Ecuatorial, también en el plano económico, Obiang indicó que Guinea siempre ha estado abierta a las inversiones españolas pero destacó que fueron las compañías energéticas españolas las que tras 10 años explorando el país terminaron diciendo que Guinea no tenía potencial petrolífero, algo que las empresas estadounidenses dejaron completamente en entredicho al descubrir gigantescos yacimientos.

El encuentro con la prensa tuvo lugar en el Palacio Presidencial, tras la entrevista que mantuvo durante cerca de una hora con Moratinos y la delegación parlamentaria que lo acompaña, ante quienes defendió la no injerencia de España en los asuntos internos del país.

En un discurso posterior durante el almuerzo, Obiang señaló que si el distanciamiento de España con Guinea se debía a una "penalización", un "buen padre siempre debe saber perdonar a un hijo insolente y descarriado". También destacó que por primera vez la visita de una autoridad española viene acompañada por representantes de "todas las capas de la sociedad española", al integrar a parlamentarios de casi todas las fuerzas políticas, empresarios y medios de comunicación.

Moratinos también tomó la palabra en el almuerzo y sugirió a Obiang que los comentarios políticos y periodísticos que se publiquen en España con críticas hacia Guinea Ecuatorial no se tomen a mal sino que se escuchen como procedentes de "un país amigo" que no quiere interferir en los asuntos internos del país.

ESPAÑA DEFIENDE LOS DDHH

Moratinos presentó a la España del siglo XXI como la "octava economía del mundo" que quiere aportar su contribución a la "defensa de los Derechos Humanos y el Estado de Derecho" y que "vive y siente" lo que ocurre en Guinea. Así, defendió que ambos países se critiquen mutuamente cuando tengan que hacerlo, como hermanos y "desde el corazón".

El ministro confió en que esta vez su visita permita dar un salto cualitativo en las relaciones y que cuando se produzcan momentos difíciles las dos partes tengan la "valentía política" suficiente para mirar al futuro. Durante la entrevista con Obiang, algunos diputados sacaron a colación el tema de la democracia y de los Derechos Humanos.

Así, el senador del PNV Iñaki Anasagasti señaló la conveniencia de que haya observadores internacionales en las elecciones, el senador de la Entesa, Miquel Bofill (ERC) abogó por la necesidad de que los ecuatoguineanos puedan expresarse y participar libremente en la vida política y el senador del PSOE José Carracao animó a Obiang a que les ayude a mejorar la imagen en España de su país.