MADRID 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, ha evitado este lunes entrar en confrontación con el Papa Benedicto XVI por sus palabras en España este fin de semana y se ha limitado a expresar su "respeto" una y otra vez, aunque ha reconocido que el partido del Gobierno no está de acuerdo en todo con el Pontífice: "En muchas de las cosas que ha dicho estamos de acuerdo y hay algunos matices en otras cuestiones", ha declarado en rueda de prensa.
Iglesias ha comparecido después de una reunión de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE --a la que asiste el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero-- y ha asegurado que la visita del Papa a Barcelona y Santiago de Compostela no se ha tratado en la reunión, y que tampoco ningún miembro de la dirección del partido ha planteado que el Gobierno debiera haber sido más contundente ante las críticas del Papa a la laicidad en España.
A su juicio, la visita de Benedicto XVI "ha salido bien" y el Gobierno, en un Estado aconfesional como es España, lo que tiene que hacer es "respetar, y así lo ha hecho", el "peso de la Iglesia Católica" en España --también teniendo en cuenta que muchos militantes y votantes socialistas son católicos-- y pero también "a los que no son de esa religión o no piensa igual". Así, ha destacado que es la propia Constitución la que dice que España es un Estado aconfesional y, por tanto, obliga al "respeto".
Según Iglesias, en la reunión de la cúpula del PSOE tampoco se ha hablado de la reforma de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa aunque, a su entender, "está en la agenda del Gobierno". "No está en el parlamento, no está en este momento en el debate inmediato", ha resumido.