MÉRIDA 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Partido Comunista de Extremadura (PCEx) mostró hoy su rechazo a los expedientes de expulsión de Izquierda Unida de Extremadura de cuatro de sus miembros y reclamó la celebración de una asamblea "democrática" que permita "superar y reconstruir a IU, y dar la palabra a los y las militantes".
Así lo acordó por unanimidad el Comité Central del PCEx, quien valoró la decisión que el pasado viernes tomó el Consejo Político Regional de IU en Extremadura, de expulsar de la organización al ex diputado autonómico Cristóbal Guerrero, y otros tres integrantes del partido como Rogelio Barrero, Cristóbal Giraldo y María José Durán.
Lamenta el PCEx que estos expedientes de expulsión, que afectan al secretario general del PCEx, Cristóbal Guerrero, y otros miembros de la dirección de este partido, están en la línea de lo que esta ocurriendo en otras federaciones, como por ejemplo Asturias. "Se trata hacer una limpieza ideológica en IU, es decir su desnaturalización".
Así, de esta forma IU pretende, a juicio del PCEx, "ultimar el cambio de movimiento político a partido clásico con fuertes anclajes y aceptación de las políticas del sistema".
Aseguran los comunistas, en una nota de prensa remitida a Europa Press, que en Extremadura, la dirección que lleva a cabo las expulsiones no es reconocida por mas del 50 por ciento de la organización, y recuerda que la X Asamblea "está recurrida desde sus mismos orígenes y aún no se han dignado contestar desde las Comisiones de Garantías. Ahora acusan", critica el PCEx.
Por todo ello, considera el PCEx que la estrategia de la dirección de IU "no es otra que mantenerse después de haber llevado a IU-Extremadura a la derrota mas absoluta", ya que según recuerdan, tras las elecciones del pasado 27 de mayo IU es una fuerza extraparlamentaria "y lejos de darse por aludidos, de asumir su responsabilidad, de intentar al menos reconstruir la organización como se ha propuesto por la parte que no aceptó el resultado de la Asamblea, intentan con estas expulsiones selectivas adueñarse y acallar el entorno crítico".
DELEGACIÓN DE LLAMAZARES
Añade el PCEx que IU-Extremadura "ha dilapidado todos sus recursos, está en manos de la Dirección Federal y obedece a los criterios de esta. Están haciendo lo que se les ordena. Quien paga manda", por lo que asegura que la dirección regional es un "delegado" del coordinador general de IU, de Gaspar Llamazares el que viene al "consejo político" de Extremadura a avalar con su presencia las expulsiones.
Por todo ello, considera el Comité Central del PCEx considera que IU Federal "debe entrar inmediatamente en un proceso asambleario limpio", en el que se diluciden su línea política, sus candidatos y su dirección. "Lo demás es jugar con trampas y tener como rehenes, de una estrategia que nos lleva a la desaparición, a la siempre sufrida militancia", señala el PCEx.
Y es que, a juicio del PCEx, en Extremadura, "es inviable cualquier otra opción que no sea la celebración de una asamblea democrática", para que "den la palabra a los militantes", pero consideran que "no quieren hacerlo porque tienen miedo a perder; así lo reconocen, de ahí las expulsiones".
Concluyen asegurando que IU- Extremadura "no tiene legitimidad para abordar ningún proceso sancionador, por tanto este Comité Central se considera excluido de la militancia de IU en la misma medida que lo son los miembros del PCEx que ellos han elegido para excluir", y avanzan que el PCEx pedirá a las agrupaciones y militantes del PCEx que "exijan en todas sus intervenciones la democratización de IU y la celebración de una Asamblea federal y, con más motivo, la regional".