OVIEDO, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El fiscal especial antidroga del Principado de Asturias, José Perals, destaca que la "levedad" de las penas por delitos de droga potencia el narcotráfico de estas sustancias, puesto que desde la perspectiva de los traficantes tal actividad es "rentable", ya que los beneficios económicos son cuantiosos y el riesgo penal muy pequeño.
Perals, en la Memoria 2008 de la fiscalía antidroga del Tribunal Superior de Justicia de Asturias que se presentó hoy, resalta la "levedad" de las penas con las que se castiga el tráfico de hachís en España. La pena para la cantidad de notoria importancia y delito cometido por una organización iría de los tres años a los cuatro años y seis meses de prisión.
"En ese escaso y mínimo arco punitivo no hay lugar apenas para poder individualizar las distintas conductas que se cometen en este tipo de delitos. No es lo mismo transportar cinco kilos de hachís que 160 kilos, ni hacerlo de una manera personal que integrado en una organización", señala el fiscal.
JUZGADOS CONTRA LA DELINCUENCIA ORGANIZADA
En este sentido, el fiscal aboga por la creación, en cada comunidad autónoma, de Juzgados especiales contra la Delincuencia Organizada, a modo de los Juzgados Centrales de Instrucción de la Audiencia Nacional (AN), con competencias en los delitos competencia de éstos cuando los mismos no exceden de la Comunidad Autónoma o cuando la actividad de las organizaciones criminales, aunque puedan producir efectos en otras Comunidades Autónomas, estén centralizadas en una sola en concreto.
El fiscal sostiene la idea de un cambio inmediato e importante en las estructuras judiciales. "No puede el Juez de Instrucción generalita que se enfrenta cada día a los juicios rápidos, los juicios de faltas, las declaraciones de detenidos por múltiples delitos, las actuaciones propias del servicio de guardia, estar al mismo tiempo resolviendo sobre la investigación relativa a una organización criminal", apunta.
DETENIDOS E INCAUTACIÓN
El fiscal refleja en la memoria que en el año 2008 las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado detuvieron en el Principado a 362 personas acusadas de un delito de tráfico de sustancias estupefacientes, frente a las 415 personas de 2007.
A lo largo del año 2008, la Memoria refleja que se ha producido un mantenimiento en las ocupaciones de sustancias estupefacientes, salvo en lo relativo al hachís que pasó de 83.975,46 gramos, en el año 2007, a 216.619,51 gramos en el año 2008. Dicho incremento se debió principalmente a una operación del Servicio de Vigilancia Aduanera que en enero permitió la ocupación de 160 kilos de hachís a una organización que la introducía desde Marruecos.
El descenso de la ocupación de heroína obedece a que en el año 2007 en una sola actuación del Cuerpo Nacional de Policía había incautado 4.500 gramos de dicha sustancia a una persona que fue detenida en el peaje de Campomanes cuando la introducía en el Principado.
DEFICIENCIAS DEL SISTEMA INFORMÁTICO
Perals pone de manifiesto en la Memoria que el sistema informático de registro de las causas es "obsoleto y no responde a las necesidades diarias y de estadística". En concreto, en materia de tráfico de drogas se ha optado por registrar únicamente las causas como tráfico de drogas en general, ya que se venía observando que existía una gran divergencia en los modos de registrar las causas según se tratara de las oficinas de Fiscalía de Oviedo, Gijón, Avilés o Langreo.
"Es necesario, por tanto, un sistema de registro de las causas más intuitivo y sencillo y que responda a las necesidades efectivas de la Fiscalía", señaló el fiscal, que pidió además que el sistema informático cuente con un sistema de alarmas.
Por último, Perals abogó por un sistema informático para el cumplimiento de los plazos de los presos preventivos y también para avisar de las causas que se encuentran pendientes de practicarse alguna diligencia o para avisar de los señalamientos de los juicios.