BARCELONA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de ERC, Joan Puigcercós, advirtió hoy a los 25 diputados del PSC en el Congreso de que peligra la unidad catalana si votan a favor de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2009, y añadió que los socialistas catalanes no lo están poniendo "nada fácil".
En declaraciones a los periodistas tras reunirse con entidades del sector del comercio, explicó que los diputados del PSC "no ayudan" a Cataluña ni al Govern ni a defender el Estatut.
Para él, el PSC debe ser consciente de que necesita la unidad, "no como un cojín o un elemento para sobresalir o defenderse", sino para que "Madrid entienda que esto no es un capricho de la clase política catalana, sino una necesidad".
Por ello, pidió a los ciudadanos que reflexionen en próximas elecciones sobre el peso real del PSC en Madrid para forzar, por ejemplo, una buena propuesta de financiación para Catalunya. "El voto del PSC en Madrid, lo que se ha llamado voto útil, se ha demostrado que no lo es".
VOLUNTAD POLÍTICA
Para el líder republicano, no es un problema de calendario sino de voluntad política del Gobierno, al destacar que es posibleque el presidente del Ejecutivo central, José Luis Rodríguez Zapatero, presente una propuesta antes de fin de año pero que "es muy factible que sea del todo inaceptable".
"No es un problema de que haga una propuesta porque podría ser del todo inaceptable, y Zapatero podría decir que ha cumplido. Sabemos de la frivolidad del presidente del Gobierno", señaló Puigcercós, quien reiteró que para aceptarla debe ser un modelo sólido, consistente, de acuerdo con el Estatut y con lo que ha expresado la unidad catalana.
Además de avanzar que prevé hablar con el presidente de la Generalitat, José Montilla, subrayó que, ante la posibilidad de que se el Gobierno presente un acuerdo político en vez de una propuesta de financiación, debe perfilar "de forma clara" el modelo y el grado de cumplimiento del Estatut.
En su opinión, un acuerdo político que concluya que debe cerrarse un modelo sólo sería una "pérdida de tiempo" y seguiría la estrategia del Ejecutivo central de ir posponiendo la decisión. "Es la estrategia de Zapatero", concluyó.
