Pípol.-El Supremo confirma las condenas por tráfico de explosivos contra Suárez Trashorras y su ex cuñado Antonio Toro

MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo ha confirmado las condenas a 10 y a 11 años y seis meses de prisión impuestos en enero de 2007 por la Audiencia Provincial de Asturias al ex minero asturiano Emilio Suárez Trashorras y a su ex cuñado, Antonio Toro (ambos procesados posteriormente por los atentados del 11-M, siendo condenado el primero de ellos), por los delitos de trafico de drogas y tenencia ilícita de explosivos que cometieron como integrantes de una banda desarticulada en la denominada 'Operación Pípol'.

La resolución del alto tribunal modifica parcialmente la sentencia de la Audiencia en relación con tres de los dieciséis condenados: Pedro Julián Corao, Javier Antuña Montes y Juan Jesús Buznego Pidal, a los que se absuelve del delito de tráfico de drogas por el que habían sido condenados a penas que iban entre los 5 y los 4 años y 6 meses de prisión porque las pruebas obrantes contra ellos son imprecisas e inconsistentes.

Uno de los fundamentos de la querella califica de "racionales y proporcionadas" las medidas de seguridad impuestas durante la vista en Gijón contra Suárez Trashorras quien permaneció esposado en la práctica totalidad de las sesiones.

Según el Supremo, "sorprende la alegación del letrado recurrente (el abogado de Suárez Trashorras) cuando le consta que en el curso de las sesiones del juicio oral insultó al tribunal y agredió a un policía que tuvo que ser asistido".

La sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado José Antonio Martín Pallín, desestima los recursos de los trece procesados que finalmente si han sido condenados en relación con la legalidad de las escuchas telefónicas que permitieron desarrollar la operación policial, señalando que la decisión del juez instructor al respecto fue "ponderada, idónea, necesaria y proporcionada".

La resolución rechaza igualmente las impugnaciones a la sentencia dictada por el tribunal asturiano respecto de las dilaciones indebidas (ya que si las hubo fue por los múltiples recursos presentados por varias de las defensas), el respeto a los Derechos Humanos durante la investigación y la validez de las entradas y registros que permitieron la incautación de la dinamita.

La sección octava de la Audiencia Provincial de Asturias, con sede en Gijón, condenó el 31 de enero de 2007 a 16 de los 20 imputados en el caso, a unas penas que suman un total de 114 años. Cuatro imputados fueron absueltos de los cargos por falta de pruebas.

Además de las penas impuestas a Suárez Trashorras y Toro, el Supremo ha confirmado las condenas de Laurencio Castaño García, el ex policía de San Martín de Rey Aurelio, y para el narco gallego Marcos Barreiro Magán. El primero deberá cumplir 11 años de prisión y el segundo a 10 años y 6 meses.

Respecto al resto de imputados el juez se confirman las penas para Angel Manuel Arenal Zapico a 9 años de prisión y al cierre del pub de su propiedad 'El Ancla' durante cinco años. Sobre los procesados José Luis Aramburu Alonso, Miguel Ángel Murillo, David García Díaz, Francisco Javier Álvarez Sánchez, Florentino García Martínez, Jorge Cardama Martínez, Antonio Rodríguez Fernández y Tomás Rincón Mallo se confirman penas que oscilan entre los 4 y los 9 años de prisión.

La investigación por el caso 'Pípol' comenzó en el primer semestre del año 2001 en relación con el tráfico de drogas, fundamentalmente cocaína y hachís en Asturias. El caso cobró importancia tras conocerse la supuesta implicación de José Emilio Suárez y de su ex cuñado Antonio Toro en la trama de los explosivos del 11-M.

La Policía halló en un garaje de Avilés que compartían Trashorras, Toro y José Ignacio Fernández Díaz, alias 'Nayo' --que se encuentra actualmente en paradero desconocido-- 16 cartuchos de dinamita industrial Goma 2 Eco y 94 detonadores eléctricos.