Piratas.- Erkoreka teme que el Gobierno convierta la llegada de los marineros en "un aluvión propagandístico"

MADRID 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, augura que el Gobierno convertirá la llegada de los marineros del 'Alakrana' a España en un "aluvión propagandístico", al igual que, según denuncia, hizo con el secuestro del 'Playa de Bakio'.

En un artículo de su página personal de Internet, que recoge Europa Press, Erkoreka teme que, ahora como entonces, el Gobierno vuelva a transmitir a la opinión pública "la falsa imagen" de un Ejecutivo que ha afrontado el episodio como "un auténtico ángel de la guarda".

A su juicio, la imagen de la llegada de los tripulantes a la base aérea de Torrejón será "conmovedora, enternecedora y emocionante", porque "las mismas ministras que soltaron perlas como la de que el riesgo de secuestro forma parte del sueldo ordinario de los pescadores, o aquella otra de que el Ejecutivo se ha gastado ya suficiente dinero en su seguridad, se acercarán a la escalerilla del avión para abrazarles efusivamente y hacer ver a la opinión pública que, el Gobierno, inasequible al desaliento, se ha encontrado siempre al pie del cañón cuando se trataba de preocuparse por su situación".

AÚN FALTA LO PEOR

Lo mismo predice que ocurrirá con el arribo de los marineros a Bilbao. "Hasta el ausente López --dice--, que tan eficazmente contribuyó a su liberación, apoyando vivamente el traslado a Madrid de los dos piratas detenidos en Somalia, saldrá del cubil en el que ha estado recluido hasta la fecha, para sacar pecho y hacer públicos sus desvelos por la pronta y feliz resolución del entuerto".

Erkoreka cree que en los próximos días la sociedad española asistirá "atónita" a la "intoxicadora" puesta de escena que se preparará para recibir a los pescadores con el objetivo de trasladar "la tierna imagen" de un Gobierno que "arropa a sus ciudadanos con el calor y la entrega de una madre, desde que nacen hasta que se jubilan". "A prepararse, que todavía falta lo peor. O mucho me equivoco, o lo que nos espera será esperpéntico", advierte.