MADRID 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró esta tarde que su formación aceptará cualquier fórmula, sea un acuerdo de la Mesa de la Cámara, una modificación reglamentaria o incluso una reforma de la Constitución, para que los meses de enero y julio sean periodos ordinarios de trabajo en la Cámara Baja y puedan convocarse sesiones plenarias.
En rueda de prensa, Sáenz de Santamaría confirmó el interés del PP, "compartido con otros grupos parlamentarios", por "dar agilidad" al Poder Legislativo, lo que podría resolverse ampliando el periodo de sesiones. "Puede ser que en otros momentos de la historia no fuera así, pero ahora los meses de julio y enero tienen tanta intensidad y actividad política como cualquier otro", arguyó.
La dirigente 'popular' mostró también su malestar por que en las dos próximas semanas no se vayan a celebrar sesiones plenarias. Por cortesía parlamentaria, cuando se aproximan citas electorales --el día 1 hay comicios en Galicia y País Vasco-- no hay Pleno para que los diputados puedan participar en los actos de campaña.
Sin embargo, Sáenz de Santamaría se quejó de que no se haya modificado el calendario de sesiones para que haya pleno la primera semana de marzo, lo que hace que su grupo parlamentario no pueda presentar preguntas, "y eso que hay motivos más que suficientes", al jefe del Ejecutivo y los ministros hasta el 11 de marzo. Generalmente cada mes hay una semana sin sesiones plenarias, que suele coincidir con los primeros días del mes.
JSUTOS POR PECADORES
Insistió en que la pretensión del PP es conseguir que en el Congreso "se trabaje, se debata y haya cupos y turnos suficientes para presentar alternativas y hacer control al Gobierno". "En momentos de crisis, todos tenemos que dar lo mejor de nosotros mismos y eso puede hacerse con más plenos, más sesiones y un seguimiento más constante de la realidad del país", sostuvo.
A su juicio, el Congreso no puede pararse por que el Gobierno "no haga su trabajo y presente proyectos de ley". "Aquí no pueden pagar justos por pecadores --sostuvo--. Si buena parte de las iniciativas legislativas del Gobierno son trasposiciones de directivas o decisiones marco, si le hacen el trabajo en Bruselas, eso no es obstáculo para que el Congreso siga trabajando".
Por ello, Sáenz de Santamaría reiteró que el PP aceptará cualquier fórmula en aras de ese objetivo no descartando incluso una reforma del artículo 73 de la Constitución, que establece que las Cámaras se reunirán anualmente en dos períodos ordinarios de sesiones: el primero, de septiembre a diciembre, y el segundo, de febrero a junio. Ello excluye, por tanto, los meses de enero y del verano.
Sin embargo, cualquier reforma constitucional --sea total o parcial-- requeriría cuando menos el acuerdo de los dos grandes partidos, PSOE y PP, dado que se exige una mayoría de tres quintos de cada una de las Cámaras para su aprobación.