MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, considera que el juicio del 11-M y la comparecencia de los expertos policiales ha demostrado que hubo "negligencia" y "gravísimos errores" en la custodia de las pruebas de los atentados y se preguntó qué motivos tiene el Gobierno del PSOE para haber permitido esa situación.
Zaplana fue preguntado por la credibilidad de la llamada 'teoría de la conspiración' a raíz de que todos los peritos policiales coincidieran ayer en negar vínculos entre el terrorismo islámico y ETA, pero el portavoz del Grupo Popular expuso otro punto de vista.
"La versión más favorable para el Gobierno reconoce que han existido gravísimos errores en la guarda de las pruebas --respondió--. Hay otra versión, menos favorable al Gobierno, pero quiero ser todo lo prudente del mundo. Si algo es el PP es perseverante cuando cree que tiene razón, y el tiempo nos está dando toda la razón".
En ese contexto, se centró en la "negligencia" en la custodia de las pruebas y recalcó que en estos años de Gobierno socialista "se ha permitido que pruebas fundamentales se deteriorasen irreversiblemente".
Es más, recordó que, en su comparecencia ante la comisión de investigación, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero se mostró seguro de todo lo ocurrido el 11-M estaba claro- "Si sabía que tenía esas pruebas cuando vino ¿por que dejaron que se deteriorasen?", se preguntó.
"HAY COSAS INEXPLICABLES"
A su juicio, el ministro del Interior, ahora Alfredo Pérez Rubalcaba, debería pedir su comparecencia en el Congreso para explicar esto: "Poco interés por el conocimiento de la verdad debía tener un Gobierno cuando custodia así pruebas fundamentales y esenciales", insinuó.
Su conclusión es que sigue habiendo "cosas inexplicables" y que la sociedad debe "tragárselas como un auto de fe". "Parece que ya nos hemos acostumbrado a que no exista ningún tipo de explicación --comentó--. Pero todo aquello que racionalmente no se entiende, no estoy dispuesto a decir que lo entiendo. Algunos se han tomado esto como un partido de fútbol en el que hay que ganar por la fuerza en lugar de profundizar en la verdad".
