Zapatero no ve útil que el PP dé pábulo a actos minoritarias contra el Rey y dice que se puede decir no a Ibarretxe con votos y razones
MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Grupo Popular en el Senado, Pío García Escudero, pidió hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que convoque elecciones cuanto antes por entender que él no puede enderezar una situación en la que, señaló, se ha puesto en cuestión la Monarquía, la bandera y la propia identidad de España. Zapatero consideró que no es útil, ni razonable que el PP dé pábulo a actitudes minoritarias contra el Rey y la Monarquía y argumentó, con relación a la propuesta del lehendakari de realizar una consulta, que su proyecto de convivencia consiste en poder discrepar con Ibarretxe, como ya hizo, pero con los votos, las razones y el debate y sin utilizar la descalificación y la deslegitimación.
Zapatero realizó estas afirmaciones durante el Pleno de control al Gobierno que se celebra esta mañana en el Senado. García Escudero preguntó al jefe del Ejecutivo por el proyecto de convivencia para Euskadi y para España que anunció Zapatero en el debate del Plan Ibarretxe en el Congreso, donde fue rechazada la propuesta del lehendakari vasco.
García Escudero reprochó al presidente el "proyecto de convivencia" que tiene y las "malas compañías" de las que se ha rodeado en esta Legislatura, en referencia a los "socios" que ha elegido, que, dijo, han llevado a España al "peor momento de los últimos 30 años" con el "cuestionamiento de la Monarquía, la bandera y la propia identidad de España".
"Usted, desoyendo los consejos de nuestros padres de no ir con malas compañías, ha elegido en esta Legislatura a unos amigos que no creen en España", les espetó y le acusó de convertir la política territorial en un "terreno de conflicto" en el que "todo el mundo cree que puede sacar tajada charlando una hora con usted".
En este punto, le recordó que Ibarretxe se queja ahora de que no quiere hablar con él de su "proyecto secesionista" cuando ha estado hablando de política con Batasuna y ETA.
También reprochó a Zapatero que acuse a los populares de "falta de apoyo" cuando les necesita. Argumentó, en este sentido, que fue el presidente quien rompió los consensos básicos al inicio de la Legislatura y le recordó también que durante la tramitación del Plan Ibarretxe en 2005, el proyecto de éste fue rechazado "gracias al apoyo que el PSOE recibió del PP".
LE SEÑALARE LA LUNA CON EL DEDO Y SE QUEDARA MIRANDO AL DEDO
Añadió que, ante el nuevo reto de Ibarretxe el problema será que le señalará "la luna con el dedo y usted sólo se quedará mirando al dedo". "Yo le diré que tenemos un problema de secesionismo grave y usted seguirá sin asumir sus responsabilidades y le echará la culpa de todo al PP", exclamó.
El dirigente popular recordó al presidente sus palabras cuando se rechazó el Plan Ibarretxe en las que habló de un nuevo proyecto para Euskadi y España que tuviera como prioridad "compartir las identidades y respetar las aspiraciones nacionales de un gran proyecto de convivencia".
Sin embargo, aseguró que "dos años y medio después, de aspiraciones nacionales estamos sobrados y el proyecto de convivencia no se ve por ninguna parte". "Hoy los nacionalistas son más radicales y los socialistas se comportan como nacionalistas".
Para apoyar su argumentación, preguntó a Zapatero si su proyecto de convivencia incluye que se quemen fotos del Rey con la pasividad de las fuerzas del orden que dependen del socialista Montilla; que "amigos suyos" de ERC amenacen a miembros del PP y Ciutadans; que sus socios pidan que el Rey deje de ser el Jefe de las Fuerzas Armadas para que lo sea Zapatero; que alcaldes socialistas no apliquen la Ley de Banderas o que Batasuna se convidere negociadora para la paz o una organización terrorista según "sople el viento".
Para García Escudero, el resultado es el "cuestionamiento de la Monarquía, la bandera y la propia identidad de España". Por ello, pidió a Zapatero que "reconozca su error, que se equivocó de amistades" y como considera que el presidente es "incapaz de corregir esta situación" cree "inexcusable" que "dé la palabra" a los españoles "cuanto antes". Planteó que "convoque elecciones ya" para que los españoles elijan un nuevo Gobierno "capaz de enderezar el rumbo" y evite que la "situación se deteriore más".
Además, se refirió con ironía a la campaña solicitada por el PSOE a las agencias de publicidad para vender una imagen del presidente de un "gran estadista, creíble, preparado, solvente y buen gestor" y aseguró que es una "misión imposible" porque están pidiendo "un milagro".
ZAPATERO PREGUNTA POR LA INTENCION DEL PP AL DAR PABULO A MINORIAS
El presidente del Gobierno respondió a las acusaciones de García Escudero agradeciendo primero sus "admoniciones, sus consejos, sus amables palabras", pero pidiendo que le permita usar el derecho que tiene a "sonreír si me apetece" y a escucharle en tono "respetuoso".
Tras esta introducción, el jefe del Ejecutivo consideró "paradigmático e insólito" que los populares den pábulo a determinadas "actitudes radicalmente minoritarias y que no representan nada en la sociedad española". En su opinión, esto no parece "ni razonable, ni útil, ni inteligente".
"Resulta paradigmático y extraño que ustedes traigan a esta Cámara con reiteración los argumentos y las acciones de grupos tan radicalmente minoritarios que nunca van a llegar a esta Cámara", exclamó el presidente y recalcó que "porque grupos minoritarios estén realizando actos injuriosos y ofensivos" contra el Rey, "ustedes digan que se pone en cuestión la Monarquía". "Resulta paradigmático e insólito, no se cuál es la intención", recalcó.
REPROCHA AL PP LLAMAR MALAS COMPAÑIAS A PNV Y CIU, QUE LE APOYARON
Zapatero también reprochó a García Escudero que le acuse de tener "malas compañías" y le recordó que el PP gobernó con el apoyo del PNV y de CiU. "Se puede negar todo, cuando no se tienen ideas, ni argumentos, se puede negar que gobernaron con el apoyo de PNV y CiU", argumentó y acto seguido se preguntó si ahora "son malas compañías" estos partidos.
"Eso carece de credibilidad", exclamó, aunque dijo que le importa menos que los populares nieguen su trayectoria ahora, sino que lo que le importa es que hagan un discurso en el que la "descalificación absoluta sea la conducta habitual que utilizan". "Se puede discrepar en todo a fondo y no tener que recurrir a la descalificación y deslegitimación de quien tiene y ostenta una representación democrática", apostilló.
Añadió que "eso es para mi un proyecto de convivencia, poder decir, como dije a Ibarretxe que no estaba de acuerdo ni en el fondo, ni en la forma, pero poderlo someter a la consideración democrática de los votos, las razones y el debate". "Por que el otro camino, el que parece asomar como tesis del PP, no conduce a ningún sitio", aseveró.
Para Zapatero "el proyecto de convivencia" se funda en la Constitución de 1978, que resuelve "grandes cuestiones" de nuestra historia y hace que estemos "orgullosos" de los 30 años de democracia, libertad y régimen constitucional. En este sentido, recordó que como en todo sistema constitucional y de convivencia democrática hay "pluralidad ideológica y de identidades". Señaló que estas están "latentes en la Constitución de 1978", están presentes en los estatutos de autonomía y lo han estado durante todo el brillante desarrollo del Estado de las autonomías.
Pero destacó que esos problemas latentes que "algunas veces" son "más evidentes", "tienen con el espíritu de la Constitución, una guía o receta que es la de buscar el máximo entendimiento y convivencia".
Zapatero dijo haber puesto "mucho empeño" en pelear en cosas esenciales --libertades, Constitución, convivencia,...-- en las que dijo el PSOE tienen la mejor hoja de servicios.
