SEVILLA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
El PP-A planteó hoy al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, si va a tomar alguna medida tras conocerse que la Consejería de Presidencia ha incluido "gatos de nóminas, de cuotas patronales de la seguridad social y dietas en el capítulo de inversiones", según la liquidación presupuestaria de 2008.
El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, criticó que Griñán no respondiera ayer ante el Pleno del Parlamento a las explicaciones que el presidente del PP-A, Javier Arenas, le solicitara sobre este asunto.
Según una información facilitada por el PP-A, tomando como base datos de la Cámara de Cuentas, la Consejería de Presidencia, en la liquidación del presupuesto de 2008, "incluye gatos de nóminas, de cuotas patronales de la seguridad social y dietas en el capítulo de inversiones".
El volumen total de gasto reconocido en el capítulo de inversiones y que se corresponde con gastos que se deberían de incluir en los capítulos primero y segundo, según los datos del PP, asciende a 232.000 euros.
Para el PP-A, el rigor en la elaboración del presupuesto debe obligar a no incluir gastos de personal en capítulo VI, de inversiones, "ya que se falsea el análisis presupuestario por incluir gasto corriente como gasto de capital".
De otro lado, Sanz también reprochó a Griñán que tampoco respondiera a Arenas sobre si el PSOE sigue "con la intención" de utilizar al Banco Europeo de Finanzas para "recolocar" al presidente de una caja, en referencia a Antonio María Claret García, presidente de Caja Granada.
Otra pregunta que el presidente dejó sin respuesta, según el dirigente del PP-A, fue la relativa al cambio de los estatutos de la Fundación Andaluza de Municipios por la Solidaridad Internacional (Fimsa) "para colocar" al ex alcalde de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), Juan Ramón Troncoso, en un puesto remunerado y que hasta ahora no existía.
Estos asuntos, según Sanz, demuestran una forma de actuar del PSOE que es un "insulto al millón de parados que hay en Andalucía", ya que se basa en una política de "recolocación" de dirigentes socialistas.
