Simancas avisa de que, ante los "días críticos" que vive España, hace falta un Gobierno "templado"
MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
El PSOE ha acusado este martes a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, de pretender imponer un "programa bárbaro" de recorte de derechos democráticos y sociales aprovechando la crisis y la ha retratado como la "campeona" en la "competición de barbaridades" en el seno de un PP "nervioso y desarbolado".
Así se ha expresado, en declaraciones en el Congreso, el diputado por Madrid y exsecretario general del PSM Rafael Simancas, miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE, después de que Aguirre haya propuesto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, una reforma del Estado autonómico, incluida la devolución de competencias de Sanidad, Justicia y Educación, para ahorrar 48.000 millones de euros.
Simancas ha pedido al Gobierno y al PP que "dejen de decir barbaridades" y que "piensen antes de hablar" porque, a su juicio, lo que están generando es "ansiedad" y desconfianza". España, ha recalcado, está viviendo "unos días críticos" y, por tanto, necesita un Gobierno y un partido de Gobierno "templado y ponderado" y no "nervioso y desarbolado", y "en plena competición de decir barbaridades".
"A VER QUÉ DICE FLORIANO"
Incluso, después de que Rajoy haya dicho en el Senado que no se plantea un debate sobre el Estado autonómico, Simancas no ha querido interpretar si sus palabras han sido un rechazo a la idea de la presidenta madrileña. "Vamos a esperar a ver qué dice el señor Floriano", ha ironizado, aludiendo al vicesecretario de comunicación del PP. "No sabemos a qué atenernos, si a lo que dice el Gobierno, el PP, el ministro 'equis' o la lideresa de Madrid", ha apostillado.
A su entender, la propuesta de Aguirre supondría retroceder "a la España predemocrática" con la supresión de derechos democráticos "como la abolición de parlamentos" y derechos sociales básicos como la educación. "La derecha más extrema quiere aprovechar la coartada de la crisis para aplicar su programa más bárbaro", ha resumido.
El dirigente socialista ha recalcado además que la presidenta madrileña "se atreve" a plantear que la reforma autonómica se pacte con los socialistas, y ha dejado claro que el Gobierno no podrá "contar con el PSOE" para aplicar "programas bárbaros, de extrema derecha".
"LOS TELÉFONOS DEL PSOE ESTÁN ABIERTOS"
Según Simancas, los "teléfonos del PSOE están abiertos" para el Gobierno, pero para dialogar sobre cuestiones "de interés de país", como la crisis, la reforma laboral o "los Presupuestos Generales del Estado, en términos de rectificación". Para el PSOE, no es "lícito" ni "decente" aprovechar la crisis para "recentralizar competencias" ni recortar derechos.
Además, ha afeado a Aguirre que plantee como modelo de salida de la crisis de Irlanda, subrayando que ese modelo es "el de la agenda neoliberal" que llevó a la crisis, la intervención, el recorte de derechos básicos y la "recesión absoluta". "Con nosotros que no cuente", ha remachado.
PAJÍN: "SI LE SOBRA ALGUNA COMPETENCIA QUE LO PLANTEE EN SERIO"
La propuesta de Aguirre ha recibido críticas de otros dirigentes socialistas. Para la exministra Leire Pajín, lo que "no es serio" es "pedir más competencias y más financiación y cuando uno es incapaz de gestionarlo pedir lo contrario". "Si a la señora Aguirre le sobra alguna competencia, que plantee la devolución en serio", ha espetado.
Por su parte, el secretario general del PSPV, Ximo Puig, ha lamentado que "la derecha siempre mire hacia el mismo sitio, la recentralización" porque "nunca ha creído en el Estado autonómico". A su juicio, "el problema no es el Estado autonómico sino cómo se han gestionado las competencias por el Gobierno de la derecha". Es más, cree que educación y sanidad desarrolladas en el nivel autonómico han sido "mucho más efectivas" para los ciudadanos.
Por eso, ha pedido "dotar adecuadamente los servicios públicos" y recortar en otras cosas antes que en educación o sanidad, y ha puesto como ejemplo las diputaciones provinciales o los pagos que ha hecho "sistemáticamente" la Comunidad Valenciana por acoger el campeonato de Fórmula 1.
