El último texto permite a las fundaciones recibir más dinero y de más donantes pero el PP ve problemas con Batasuna y con los créditos
MADRID, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Diego López Garrido, anunció esta mañana que la reforma de la financiación de los partidos políticos comenzará a discutirse en la ponencia parlamentaria correspondiente dentro de quince días.
La actual Ley de Financiación de Partidos Políticos, que data de 1987 y es la más antigua de Europa en esta materia, ha vivido varios intentos de reforma en los últimos años, pero hasta ahora nunca han prosperado, pese a las reclamaciones del Tribunal de Cuentas. El 20 de noviembre de 2005 el Pleno del Congreso dio un paso hacia su actualización tomando en consideración, por unanimidad, una proposición de ley presentada por ERC.
La tramitación de la propuesta ha transcurrido lentamente con el propósito de favorecer el máximo consenso. Los grupos parlamentarios presentaron sus enmiendas en junio del pasado año y no fue hasta las últimas navidades cuando el PSOE empezó a exponer el primero de sus borradores, basado en la iniciativa original de ERC.
Socialistas y republicanos, con otras minorías, han ido perfilando una reforma en la que se mantienen las dos vías de financiación de los partidos: las aportaciones públicas para su funcionamiento ordinario y para los procesos electorales, y las donaciones privadas, que no podrán ser anónimas y que los donantes (particulares y empresas) tendrán un límite anual de 90.000 euros, con posibilidad de desgravar.
En su intervención en el Fórum Europa, López Garrido aseguró hoy que esta reforma "va a introducir la máxima transparencia en los partidos, y también en sus fundaciones".
HASTA 120.000 EUROS AL AÑO PARA FUNDACIONES.
De hecho, en la última oferta del PSOE, a cuyo contenido tuvo acceso Europa Press, se incide en la regulación de las fundaciones ligadas a los partidos políticos. Con relación a su anterior borrador y a lo que en su día propuso ERC, los socialistas proponen ahora relajar los requisitos de control de estas entidades y permitir que reciban más dinero y de más donantes.
Así, propone el límite de las aportaciones que una persona física o jurídica pueda hacer a las fundaciones sea de 120.000 euros anuales, 30.000 euros por encima del tope que se propone para las donaciones a partidos políticos. Además, se permite que las empresas que contratan con la Administración puedan dar dinero a una fundación política, cosa que se les impide hacer con un partido.
Sin embargo, el PP considera que los principales escollos para la reforma son las operaciones de condonación de deuda y la posibilidad de que formaciones vinculadas a Batasuna puedan percibir subvenciones públicas, según aseguraron a Europa Press en fuentes de la dirección del Grupo Popular, a la espera de conocer la última oferta lanzada por los socialistas.
En la reforma legislativa que actualmente se tramita en el Congreso, el PP tiene presentadas enmiendas para prohibir que se entreguen subvenciones públicas, sean estatales o autonómicas, a formaciones que incurran en conductas sancionadas en la Ley de Partidos o que incluyan en sus órganos directivos a condenados por terrorismo, así como para rechazar operaciones de condonaciones de deuda por encima de los 90.000 euros anuales.
RENEGOCIACIONES SEGÚN LA COSTUMBRE.
En la última propuesta que el PSOE ha hecho llegar a los distintos grupos parlamentarios, estos dos asuntos no se recogen como desea el Grupo Popular. De hecho, se mantiene la autorización a los partidos para poder renegociar su deuda con los bancos y el único límite que se establece es el de "los usos y costumbres del tráfico mercantil", pero sin cuantía máxima alguna.
Estas operaciones de renegociación de créditos y condonación de intereses han sido tradicionalmente un punto que ha enfrentado a los dos partidos mayoritarios. El PSOE, fundamentalmente a raíz del referéndum de la OTAN de 1986, acumuló mucha deuda con los bancos que ha tenido que ir renegociando paulatinamente y frente a duras críticas del PP. La última polémica se suscitó al hacerse pública la condonación parcial de un crédito que La Caixa había concedido al PSC, cuyo primer secretario, José Montilla, era entonces el ministro de Industria que lidiaba con la OPA que Gas Natural, participada por La Caixa, lanzó sobre Endesa.
En cuanto a los recursos públicos que puedan llegar al mundo de Batasuna, el PSOE sólo ha accedido ahora a incluir un nuevo apartado en su artículo 3 que permite la suspensión de la entrega de las subvenciones públicas pero siempre por decisión de la autoridad judicial y a propuesta del Ministerio del Interior, y en aquellos casos en que ya se ha "iniciado el procedimiento de ilegalización" del partido aludido.
