Pujol valora positivamente el Tratado de Lisboa pero denuncia la "crisis" de "identidad" de la UE

Actualizado: lunes, 22 octubre 2007 14:58

BARCELONA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

El ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol (CiU) consideró hoy "positivo" el acuerdo alcanzado en Lisboa respecto al Tratado constitucional de la Unión Europea (UE), pero se quejó de que "se limita a temas estrictamente económicos y de funcionamiento" y deje de lado cualquier referencia al "alma, la identidad y la cultura europea".

Así, lamentó la "crisis" en que ve inmersa ala UE por la "falta de una identidad europea" que sea comúnmente asumida por sus ciudadanos.

En un desayuno de prensa junto al presidente del Nexus Institut de Tilburg, Rob Riemen, Pujol alertó de que sin la configuración de esta "identidad europea" en la que se sientan reflejados sus ciudadanos --como denuncia también Riemen-- "es muy difícil que se pueda alcanzar el ideal de Europa como una gran potencia mundial".

Rob Riemen señaló que esta "identidad" o "cultura" europea debería basarse "en lo que tienen en común" los pueblos que componen la UE, y que delimitó en los "grandes valores humanísticos", como los de "libertad, raciocinio y respeto a todos los seres humanos".

El ensayista holandés denunció que, sin embargo, la sociedad europea está inmersa en una "cultura 'kitch", en que priman los valores superficiales y de entretenimiento y se aparta "lo realmente importante", "los valores más altos de la ética y la educación, que son los que forman la esencia de la cultura".

Advirtió de que esta deriva de la sociedad europea supone "una crisis aún mayor" que la que representa el "terrorismo internacional", y abogó por forjar una "opinión pública" sensible a los valores y principios básicos de la cultura europea, señalando que los políticos siguen siempre la estela de lo que pide la opinión pública.

Sobre la posible integración de Turquía u otros países como Rusia en la UE, Riemen remitió a la máxima del filósofo griego Isócrates cuando dijo que "no es griego quien nace en Grecia o tienen sangre griega, sino quien comparte los valores griegos", para señalar que deberán ser esos mismos países "los que hagan una elección" sobre su futuro.

"Antes que nada hemos de concentrar los esfuerzos en crear una identidad europea, y luego ya seguiremos adelante" valorando qué países se unen a ella, dijo Riemen.

Por su parte, Pujol remarcó que estos valores y principios que constituyen la identidad europea, y que desarrollaron en el siglo XX la idea de los derechos humanos, proceden fundamentalmente del pensamiento "griego, judío y, en consecuencia, también cristiano".