9-M.- Quintana dice que la expectativa del BNG no es formar parte del Gobierno español, pero descarta pactar con el PP

Reclama que Galicia ocupe el papel que "históricamente le corresponde" en la "nueva arquitectura plurinacional" del Estado

Europa Press Nacional
Actualizado: viernes, 25 enero 2008 14:30

MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

El portavoz nacional del BNG y vicepresidente de la Xunta de Galicia, Anxo Quintana, afirmó hoy que la expectativa de los nacionalistas gallegos "no es formar parte del Gobierno del Estado", al tiempo que descartó llegar a algún tipo de acuerdo en este sentido con el PP por considerar que esta formación está en las "antípodas" de la suya.

"No tenemos ningún atavismo contra nadie, ni contra el PP. Para acordar el BNG sólo se fija en ideas y proyectos y el PP está en unas antípodas que son tremendamente negativas para Galicia, por lo que no veo ninguna posibilidad de acuerdo. Pueden existir muchas más posibilidades de acuerdo con el PSOE", señaló durante su intervención en los desayunos informativos del Fórum Europa.

En este sentido, apuntó que el BNG concurre a las elecciones convencido de obtener un aumento de votos "considerable" respecto a 2004, y de que no va a haber mayorías absolutas, y agregó que su objetivo es "aportar lealmente a la toma de decisiones para que Galicia tenga un papel importante en la política estatal". "Tras el 9-M esperamos que haya una configuración de las Cortes que permita a Galicia hacer una mayor aportación", subrayó.

Volviendo sobre los pactos post electorales, destacó que su formación hace propuestas para solucionar los problemas de la sociedad gallega, "no para acordar con unos u otros". Así, recordó que el BNG lleva "doce años con representación en las Cortes Generales, y no ha habido ninguna cuestión de Estado a la que no haya contribuido", por lo que insistió en que ahora quieren "más fuerza".

Por ello, aseguró que los nacionalistas gallegos son "gente de fiar", por ser "muy claros" en sus planteamientos, al tiempo que puntualizó que el BNG no es un proyecto independentista, sino nacionalista, que "pretende que Galicia participe en el Estado y ayude a convertirlo en plurinacional".

"Al hablar de acuerdos con los nacionalistas siempre aparece la palabra chantaje. Sin embargo, yo creo que los nacionalismos hacen una contribución positiva en la toma de decisiones globales, a partir de principios y valores. No pactamos con cualquiera a cualquier precio", argumentó.

"MAYOR PESO POLÍTICO" PARA GALICIA

Acerca de la posición de Galicia en el Estado, planteó que el imaginario "tan extendido que hace de Galicia una realidad invisible, estableciendo una triangulación de poderes entre el Gobierno central y los Gobiernos de Euskadi y Cataluña, tiene una elasticidad que no da ya para más".

Frente a quienes reclaman para Galicia un protagonismo similar al de Euskadi y Cataluña, defendió que ésta debe ocupar el papel que "históricamente le corresponde en la nueva arquitectura plurinacional de la que debe democráticamente dotarse el Estado español en los próximos tiempos".

Así, reclamó que Galicia tenga un "mayor peso político" en el Estado, "ampliando el alcance de la influencia" en las decisiones del Gobierno central, y para lograr avances sustanciales por esta senda consideró "determinante" tener una representación propia en las Cortes.

Según dijo, muchos gallegos desean que Galicia pueda tener en Madrid una "voz políticamente más potente" para situar los intereses gallegos en el primer plano del debate político e influir "decisivamente" en las decisiones del Estado. Además, recalcó que el horizonte democrático que "tensiona al Estado español es inequívocamente pluralista", y añadió que a ese carácter plurinacional "debe atender el modelo futuro de gobernabilidad".

"Un modelo que reconozca su legitimidad no sólo en una amplia mayoría parlamentaria, sino también en la capacidad del Gobierno central para concertar sus estrategias con los autogobiernos nacionales de Cataluña, Euskadi y Galicia. En la construcción de nuevas relaciones con el Estado el BNG no está sólo, ya que Galeuscat es un instrumento determinante para lograr el reconocimiento de las capacidades políticas de Galicia, Euskadi y Cataluña", aseveró.

LEY ELECTORAL

Sobre una reforma de la Ley Electoral, dijo que pretender que prime a la lista más votada es "ir contra la columna vertebral del sistema constitucional", y expuso que lo mejor es un sistema que permita que la gobernabilidad sea "con una base de fuerzas que tienen que corresponsabilizarse y llegar a acuerdos", ya que en su opinión "otro modelo, más presidencialista, traería más problemas que el actual".

Explicó que el BNG propone reformar esta Ley Electoral para que el número de escaños por provincia se establezca en base al censo electoral, y no a la población de derecho. Además, reclamó que se regule el alcance del derecho al sufragio de los residentes ausentes y se cambie el actual procedimiento de votación.

Acerca del Censo de Residentes Ausentes, tan importante para Galicia, habló de "escándalo democrático sustentado por la confabulación de las fuerzas políticas mayoritarias" y que se mantiene por la "invisibilidad política de Galicia". "A este censo se apunta uno de oficio, las papeletas las reciben de oficio, de modo que es posible y de hecho ocurre que votan personas muertas. El 85 por ciento de él no tiene más relación con Galicia que la adhesión sentimental", aseguró.

Criticó que sus 300.000 integrantes no se contabilicen para el número de diputados asignados a Galicia. Según dijo, si se contaran, Galicia "podría tener cinco diputados más", y aseguró que esto "no interesa porque el BNG podría tener incluso su propio grupo parlamentario en las Cortes".

Preguntado acerca del mantenimiento del 8 por ciento de inversión del Estado en infraestructuras, señaló que es "posible, necesario y justo", ya que Galicia tiene un retraso en infraestructuras "muy importante". Recordó que Galicia es el 6 por ciento de la población y sólo pide "dos puntos adicionales para paliar este déficit, lo cual no causa ningún problema a la configuración de las cuentas comunes del Estado".

En este punto, defendió la necesidad de que Galicia reciba más competencias para desarrollar su autogobierno como una forma de "generar más bienestar" para los ciudadanos. Centro su reivindicación en seguridad vial y salvamento marítimo, y apostó por impulsar un nuevo Estatuto y la reforma del sistema de financiación.

GOBIERNO GALLEGO

Sobre las relaciones dentro del gobierno gallego, indicó que hay "muchas leyendas urbanas", al tiempo que subrayó que en España hay "poca cultura de coalición", lo que provoca que cualquier "discrepancia" se vea como "noticiable y escandaloso".

En materia económico, dijo que "no es lógico sumarse al catastrofismo, ni tampoco a la postura de los brazos cruzados al grito de aquí no pasa nada". Así, propuso hacer frente a la situación con políticas valientes y planteó que la desaceleración tarda un poco más en llegar a Galicia, que eso sí, "no tiene las estructuras económicas propias para vivir por su cuenta al margen de la economía internacional".

En su intervención explicó que el BNG pretende impulsar políticas sociales y económicas apostando por la calidad y la estabilidad del empleo, la mejora de los servicios públicos y de las prestaciones sociales y la extensión de nuevos derechos, y que se palien los déficits heredados en la dotación de servicios sociales, ampliando las dotaciones precisas para universalizar las prestaciones del Sistema Galego de Benestar garantizando el 10 por ciento de los fondos que provee el Estado para el desarrollo de las políticas para paliar las situaciones de dependencia.

Finalmente, resaltó la puesta en marcha del Plan Sectorial de Suelo Residencial, que permitirá calificar y tramitar suelo para convertirlo en residencial con destino a vivienda protegida. El objetivo del Plan será lograr seis millones de metros cuadrados que permitirán acoger unas 40.000 nuevas viviendas protegidas.

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