SANTIAGO DE COMPOSTELA 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, auguró hoy que, si su formación "es decisiva" en las Cortes tras el 9 de marzo, en siete años se corregirá el "déficit" que, a su juicio, padece Galicia en materia de infraestructuras.
"Completaríamos un ciclo de diez años -sumando los tres últimos en los que el Bloque apoyó los Presupuestos Generales del Estado- que serviría para restituir el déficit existente", garantizó en un acto de campaña bajo el viaducto del AVE a su entrada en Santiago, en O Eixo, donde estuvo arropado por dirigentes nacionalistas de la comarca compostelana.
De hecho, aseguró que éste será el "objetivo prioritario" de la formación frentista en la siguiente legislatura, aunque por encima de la alta velocidad o las autovías, enfatizó que lo que necesita Galicia es "autoestima y proyectos políticos que sean la expresión de ello". Así, erigió al Bloque en una "máquina" de generar la autoconfianza de la sociedad gallega.
Con todo, Quintana quiso escenificar la apuesta del BNG por que la comunidad "no sea la última" en estar conectada a la Meseta a través de la alta velocidad como, lamentó, ocurrió con las autovías. En este sentido, constató cómo cuando el nacionalismo gallego no está presente en el Congreso y en el Senado se producen "retrasos", por lo que pidió el respaldo de los electores.
GALICIA BARATA.
En concreto, abogó por impulsar tramos del AVE como el Lubián-Ourense o la salida sur de Vigo para que llegue en 2012, y se refirió también a la creación de una red de cercanías y a una mejora de las conexiones portuarias y aeroportuarias.
"Galicia no es un país de pedichones", remarcó, y ahondó en que las fuerzas estatales buscan que la comunidad "les salga barata". Además, incidió en que fue tras la catástrofe del 'Prestige' que se produjo un "cambio de tendencia" en la relación entre el Gobierno central y la autonomía gallega.
De hecho, recordó que durante los tres últimos años Galicia recibió el ocho por ciento de la inversión del Ejecutivo en materia de infraestructuras, en unas cuentas que respaldaron los diputados nacionalistas.