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MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha dicho este martes a CiU que "lo moderno" y "lo que se lleva en el mundo" es la "identidad territorial de los Estados", a la vista, ha señalado, de la respuesta que han dado los países occidentales a las aspiraciones separatistas de la península de Crimea, en Ucrania.
En la sesión de control al Gobierno en el Pleno de la Cámara Alta, Rajoy ha afirmado que quiere que Cataluña y el resto de España estén "en la misma onda en la que está todo el mundo occidental", como así ha demostrado a raíz de la crisis ucraniana y el referéndum convocado en Crimea.
"Respeto a la identidad territorial de todos los Estados y a la soberanía nacional. Esto es lo moderno, esto es lo que se lleva en el mundo y esto es lo que sirve al progreso de los pueblos", ha explicado el jefe del Ejecutivo.
En este sentido, ha insistido en que cualquiera tiene "derecho a opinar sobre nuestro país" porque "eso es la democracia y eso es la soberanía nacional", si bien ha dejado claro que, aunque está abierto al "diálogo", a lo que no está dispuesto es a "transgredir la ley" aceptando la celebración de un referéndum soberanista en Cataluña.
ESCUCHAR PRIMERO A LOS CATALANES
Así ha contestado el presidente al portavoz de CiU en el Senado, Josep Lluis Cleríes, quien ha afirmado que la Generalitat "no quiere el proceso de recentralización y retroceso democrático" que, a su juicio, pretende el Gobierno, por lo que le ha instado a "escuchar" primero a los catalanes.
El senador ha reprochado al presidente que hable del futuro de Cataluña en cualquier otro lugar que no es Cataluña y con personas que no son los responsables políticos de la comunidad. "No habla de Cataluña con el señor Artur Mas ni con los catalanes. No da la cara. El deseo de Cataluña no es de una persona, sino el de un pueblo por decidir su futuro porque ustedes nos han llevado a donde estamos. Sea valiente y hable de todo. Escuche al pueblo de Cataluña en las urnas: es una buena manera de escuchar a un pueblo", ha manifestado.
Asimismo, Cleries ha comentado a Rajoy que en el Debate sobre el estado de la Nación de hace dos semanas ejerció un "tono paternalista" al decir que se preocupaba por los ciudadanos de Cataluña, algo que, en su opinión, se contradice con las políticas que está llevando a cabo su Gobierno.
En este sentido, ha afeado al presidente medidas como la subida de impuestos, políticas que llevan a la bajada del poder adquisitivo de la ciudadanía y, por tanto, al "empobrecimiento" de ésta, la reforma local o el hecho de que el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) es "un préstamo" que la Generalitat tiene que devolver.
SE PREOCUPA POR "TODOS" LOS CIUDADANOS
El presidente ha comenzado contestando al portavoz que efectivamente se preocupa por "todos los ciudadanos españoles, hayan nacido donde hayan nacido", tras lo cual ha asegurado que "nunca" renunciará a esta tarea, lo que ha provocado los aplausos de la bancada del Grupo Popular. "Tomamos decisiones para las personas. Tomamos medidas que también beneficia a los ciudadanos de Cataluña", ha afirmado.
Así pues, y aunque ha reconocido que el FLA es un préstamo, ha recordado al portavoz que "gracias a él se ha impedido la quiebra de la Administración autonómica, se ha pagado a los farmacéuticos y se han pagado los servicios públicos". "Y lo he hecho porque es mi obligación. Ha sido una buena operación y volveremos a hacerla las veces que hagan falta", ha subrayado.
Además, ha remarcado que todos los efectos positivos que puedan tener las políticas de su Gobierno sobre la macroeconomía también benefician a Cataluña porque "se trata de hacer un trabajo conjunto". "Me preocupo de los ciudadanos de Cataluña porque no quiero una Cataluña fuera del euro, no quiero una Cataluña fuera de Europa, no quiero una Cataluña fuera de las organizaciones internacionales", ha añadido.
Sobre las acusaciones de falta de diálogo con la Generalitat, Rajoy ha reconocido que tiene "defectos", pero que en su vida política no se ha "caracterizado por no hablar", tras lo cual ha afeado al portavoz de CiU que se tuvo que "enterar por los medios de que alguien iba a hacer un referéndum ilegal y que había fijado las preguntas".
"Póngase en mi lugar. ¿Qué habría hecho usted? Eso no es dialogar, es tratar de imponer. No se puede imponer la doctrina de una persona. Por encima de la ley no estoy dispuesto a que pase ningún ciudadano, y el primero, yo", ha sentenciado entre los aplausos de los senadores 'populares'.
