MURCIA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, consideró hoy "inmoral" e "inaceptable" la política antiterrorista del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, y aseguró que "antes que apoyarla" prefiere dedicarse "a otra cosa".
Rajoy, quien participó en Murcia en el acto de presentación de los candidatos a las alcaldías de los 45 ayuntamientos de la Región, culpó a Rodríguez Zapatero de romper los pactos que había en esta materia.
"Y los rompió porque quiso, unilateralmente, porque prefería pactar con otras fuerzas políticas minoritarias que tienen criterios políticos muy distintos a los que tienen la inmensa mayoría de los españoles", añadió.
Por ello, se preguntó cómo va a dar su apoyo "a un presidente del Gobierno que sustituye el objetivo de la derrota de ETA por el objetivo de la negociación con ETA".
"Es que voy a apoyar yo la liberación de De Juana Chaos o es que voy a apoyar yo el espectáculo bochornoso que se ha permitido con Otegi en la última semana", interrogó Rajoy, para quien el dirigente de Batasuna "ha tenido un trato privilegiado por parte del aparato del Estado".
Por ello, Rajoy reiteró que "tenemos que recuperar el consenso en la lucha contra el terrorismo", y consideró que lo que está pasando en España "es verdaderamente inaudito", puesto que "no ocurre en ningún país del mundo, porque no hay dirigentes en ningún país del mundo civilizado que se comporten de la manera en la que se comportan algunas personas aquí".
En este sentido, recordó que el Pacto Antiterrorista firmado por el anterior Gobierno de Aznar junto a PP y PSOE, rubricado por los secretarios general de ambas formaciones, Javier Arenas y el propio José Luis Rodríguez Zapatero, "tenía el respaldo de la inmensa mayoría de los españoles".
Sobre el mismo, aseguró que "decía que no se negocia, ni se paga precio político por matar o por dejar de matar". "Si no lo hiciéramos así, el terrorismo se convertiría en un instrumento útil y hábil para hacer política", advirtió.
Igualmente, Rajoy comentó que ese Pacto "decía en segundo lugar vamos a modificar las leyes para ser más eficaces en la lucha contra el terrorismo", y así "hicimos la Ley de Partidos, la ley que liquidó la 'kale borroka', ilegalizamos Batasuna, la metimos en la lista europea de organizaciones terroristas, y debilitamos a ETA".
El tercer punto del Pacto, según el líder del PP, era que "nadie tomara decisiones unilateralmente; las cosas se pactan". "Mientras el PP gobernó no adoptó ninguna decisión en materia de lucha contra el terrorismo sin acuerdo del PSOE", aseguró.
Sin embargo, "todo esto lo rompió Rodríguez Zapatero porque quiso, unilateralmente" y "ahora dice que no lo apoyo". "Pero cómo lo voy a apoyar", inquirió.
RECUPERAR LOS CONSENSOS DE LA TRANSICIÓN
Por todo ello, diferenció la actitud tomada por el Gobierno con la que él va a tomar y aseguró que el primer punto del programa electoral del Partido Popular en las próximas elecciones generales será el "sentido común, sensatez y equilibrio".
Además de, añadió, "recuperar los consensos de la Transición, ya que tiene que haber consenso en el modelo de Estado". Rajoy defendió que España "siempre fue los que los españoles quisieron que fuera, y la inmensa mayoría de los españoles quieren que España sea una nación, de ciudadanos libres e iguales, inspirado en principios de cohesión social y solidaridad".
"La gente quiere eso, la inmensa mayoría", independientemente de que "voten al PP, al PSOE o al Partido Comunista", insistió. Aunque, no obvió que "hay otros que quieren otra cosa y lo dicen", pero "son la inmensa minoría", apostilló.
A su juicio, "cuando los grandes partidos se ponen de acuerdo en estos asuntos la sociedad está equilibrada, está unida", independientemente de que siga existiendo "el clásico debate de las democracias sobre si uno vota a un partido y otros votan a otro".
ESTATUTO DE CATALUÑA
Otra de las diferencias que apuntó Rajoy entre su política y la del actual Gobierno es la prioridad del Ejecutivo en esta legislatura: el Estatuto de Cataluña, que "ya tiene siete recursos de inconstitucionalidad, uno del Partido Popular, otro del Defensor del Pueblo y cinco de otras tantas Comunidades Autónomas, alguna no gobernada precisamente por el PP", remarcó.
De igual forma, recordó que "sólo el 35 por ciento de los ciudadanos" votaron el Estatuto, por lo que consideró que "no parece que fuera una enorme preocupación ni que generase un entusiasmo indescriptible".
Por contra, resaltó, produjo "división y tensión entre Comunidades, la ruptura del Gobierno catalán, un pacto del presidente del Gobierno con el líder de la oposición en Cataluña, el incumplimiento del pacto por parte del presidente del Gobierno con el líder de la oposición, expulsión del presidente de la Generalitat y liquidación del tripartito" todo para "volver a lo del principio: otra vez el tripartito y otra vez Carod Rovira dando instrucciones", lamentó.
En este sentido, se preguntó que esta situación "a quién beneficia", al tiempo que apuntó a que "ya hay quien está diciendo que eso es sólo un primer paso hacia no se sabe qué y hay quien ya está planteando un referéndum sobre la autodeterminación o la independencia".
Por ese motivo, pidió "un poco de sentido común" a los dirigentes políticos, ya que, argumentó, en todas partes hay partidos políticos que hacen propuestas minoritarias, "eso no es ningún problema", pero "quien tiene la responsabilidad de gobernar una nación tiene una responsabilidad mayor a la hora de tomar decisiones".
Rajoy se refirió a que el presidente del Gobierno "en vez de pactar con la oposición las grandes cuestiones nacionales como se hizo siempre, lo ha hecho con pequeños partidos minoritarios y radicales" y de ahí "el radicalismo que hemos vivido en la política española a lo largo de estos años", indicó.
Finalmente, Rajoy sentenció que "en España no ha habido un problema de socialismo, lo que ha habido es un problema de falta de sentido común, de patriotismo y de cualquier tipo de ideas y de razones por parte de quien está al frente del Gobierno".
