CARMONA (SEVILLA), 27 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, calificó hoy del "colmo de los colmos" la propuesta de que el presidente del Gobierno sustituya al Rey como jefe supremo de las Fuerzas Armadas, apuntando que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su política han llevado a España a unos "extremos de radicalidad insoportables".
Durante un acto público en la localidad sevillana de Carmona, Mariano Rajoy manifestó que el "gran objetivo" de Rodríguez Zapatero de integrar a los nacionalistas en el sistema ha tenido, exactamente, el efecto contrario, ya que esas fuerzas se han "radicalizado" y, en algunos casos, se han situado fuera de la Constitución Española.
El líder del PP insistió en su mensaje de que Rodríguez Zapatero se está comportando con una "frivolidad impropia" del presidente de España, al tiempo que estimó que se ha visto "desbordado" por el radicalismo de algunos partidos nacionalistas, de manera que, en modo alguno, está a la "altura de las circunstancias".
Mariano Rajoy manifestó que, ante todo lo que está ocurriendo en España últimamente, donde se "insulta" al Rey o se queman sus fotografías, él tiene muy claro que va a defender la Constitución, la Monarquía, la bandera, la nación española y la igualdad de todos los españoles, algo en lo que también creen muchos ciudadanos. Dijo que sería "inimaginable" que en países como Francia o Estados Unidos que se originara un debate similar sobre sus respectivas banderas.
Rajoy recordó el acuerdo que alcanzaron años atrás todos los partidos para que en España hubiera una Monarquía, de manera que, ante cualquier "ataque" a la misma, el siempre estará allí para defenderla y exigir que se cumpla la ley. Insistió en que él siempre defenderá la nación española y la igualdad de todos los españoles vivan donde vivan, oponiéndose a cualquier "chantaje" y a toda negociación con la banda terrorista ETA, que, en modo alguno, puede "ganar la batalla a una nación de 44 millones" de ciudadanos.
El líder del PP se mostró convencido de que él ganará las próximas elecciones generales porque el actual Gobierno sólo ha demostrado durante la legislatura "incompetencia, falta de sentido común y de rumbo" y ha funcionado por "improvisaciones", además de generar problemas y debates que no tienen ningún resultado positivo para los españoles. Asimismo, se mostró convencido de que Rodríguez Zapatero ha "traicionado" algunos de los ideales del PSOE, señalando que los socialistas que gobernaron antes creían en España y, sin embargo, él dice ahora que nación es un concepto "discutido y discutible". Para Rajoy, un señor que "no cree en su país", no puede ser presidente del Gobierno.
Asimismo, Mariano Rajoy preguntó a Zapatero qué política exterior está desarrollando en estos momentos y dijo que él no quiere que España sea el "hazmerreír del mundo" como se demostró, en su opinión, en el breve encuentro del presidente español con el presidente de Estados Unidos, George Bush, en la sede de la ONU. Según dijo, mientras otros presidentes de países europeos mantenían encuentros entre sí y con otros líderes importantes, Zapatero sólo concertó encuentros con los dirigentes de "Micronesia y Bolivia".
PGE Y SOLBES
De otro lado, Mariano Rajoy recalcó que los Presupuestos Generales del Estado para 2008 son un "disparate" y replicó al vicepresidente económico, Pedro Solbes, por sus declaraciones relativas a que el PP dejó la "despensa vacía", que el Partido Popular puede tener muchos "defectos", pero discutir ahora su gestión económica "ni es serio ni es creíble", sobre todo, cuando el anterior Ejecutivo de José María Aznar posibilitó que se siguieran pagando las pensiones, que se crearan empleos y que España se convirtiera en una potencia económica.
Para Rajoy, hay que reconocer que Solbes es el "más capaz del Gobierno, pero ello no tiene ningún mérito, no ha hecho disparates, pero tampoco ha hecho nada", como se ha puesto de manifiesto, a su juicio, con los problemas en los salarios, la subida de las hipotecas y de la cesta de la compra y las dificultades que tienen muchas familias para llegar a final de mes.
Lamentó que ahora que están cerca las elecciones, el Gobierno de Rodríguez Zapatero se dedique sólo a las "promesas", prometiendo pisos y alquileres, mientras que se han presentado unos PGE que han conseguido "algo impensable", como es "pelear" a todas las comunidades, generando un "lío estratosférico". Según dijo, los dos únicos criterios que debe haber para el reparto del dinero de los PGE entre las comunidades son las necesidades de cada territorio y que todos los españoles tienen que tener los mismos derechos.
