MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU, Artur Mas, aseguró hoy que la medida conocida como 'minitrasvase del Ebro', que el Gobierno central aprobó el pasado viernes para afrontar la escasez de agua en Barcelona de cara a los próximos meses, es un "trasvase como una catedral". Además, defendió una vez más un trasvase desde el Ródano porque si se puede comprar energía en Francia, y de origen nuclear, también se debería poder importar agua.
Así se expresó Mas en el desayuno informativo organizado por Europa Press, en el que calificó de "hipocresía" el hecho de que el Ejecutivo socialista evite hablar de trasvase, cuando a su juicio, está claro que la medida aprobada lo es.
"Ha ocurrido que los 'antitrasvasistas' de antaño son ahora 'trasvasistas', y no quieren que esto sea dicho porque son gente muy puritana", ironizó. En este sentido, insistió en que cuando se presenta un conducto de esa longitud que lleva agua de una cuenca a otra, se trata de un "trasvase". "La gente no es tonta" y lo "sabe", señaló.
Respecto a este conducto, que en principio resolverá el problema inmediato de agua en Barcelona, aseguró que el mismo derecho tiene la Comunidad Valenciana o Murcia como el resto de regiones a contar con una medida semejante si es necesario.
A su juicio, esta decisión para solventar el problema en Barcelona "no" es una humillación para la Comunidad Valenciana, como apunta el presidente Francisco Camps, ni se puede convertir en un "agravio". Para Mas, no tiene sentido seguir "peleando por un recurso tan escaso como el agua cuando éste se encuentra a unos centenares de kilómetros", en Francia.
En este contexto, Mas criticó duramente el hecho de que el conducto que trasvasará agua excedente del Ebro a Barcelona se construya a costa de la partida para infraestructuras que se contempla en el Estatut. "Es escandaloso e impresentable que estas obras de emergencia sean a cuenta del Estatut", dijo, recordando que esa medida incorporada a la norma catalana se introdujo como compensación por el déficit histórico en Cataluña "admitido" por parte del Estado.
En la misma línea, el presidente de los nacionalistas catalanes volvió a defender el trasvase del río Ródano, en Francia, cuyas obras no tienen porqué tardar "quince años", aunque tal vez "cinco". Sin embargo, dejó claro que hay que empezar ya el camino para llegar "al puerto".
IMPORTAR ENERGÍA SÍ, ¿POR QUÉ NO AGUA?.
Además, recordó que cuando se trata de otros bienes sí se recurre a países vecinos, como es el caso de Argelia con el gas o de la propia Francia, donde se proyecta una conexión eléctrica cuando esta energía proviene de centrales nucleares galas. Al hilo de este tema, calificó de "hipócrita" que "no se quiera ni oír hablar" de las centrales nucleares en España. "No digo que haya más energía nuclear, pero sí que hay que hablar en serio de este asunto", reclamó.
En este contexto, aseguró no comprender por qué con el tema del agua es diferente adquirir los recursos desde Francia. A su juicio, el problema es que grandes asuntos como el agua y la energía, entre otros, "se abordan con improvisación y miedo escénico". El país debería "tomarse un tiempo de cara al futuro para enfocar sus grandes déficits", subrayó.
Mas también reprochó a los socialistas sus propias contradicciones y les pidió que se aclaren, teniendo en cuenta que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió en el debate de investidura a estudiar el trasvase del Ródano cuando el día anterior el presidente de la Generalitat, José Montilla, se lo negó al propio Mas. "Antes, el problema estaba en Madrid y ahora, está en Cataluña", apuntó, en referencia a la oposición de Montilla a las obras del Ródano.
