MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, reveló hoy que los dos sirios detenidos ayer por la Policía en Madrid contaban con 700.000 euros distribuidos en diferentes cuentas de varios países. Este dinero, según explicó el ministro, era manejado a través de empresas y testaferros y se utilizaba para invertir en España y sacar beneficios que, después, eran dedicados presuntamente a financiar actividades de terrorismo islamista.
Rubalcaba explicó que en el registro del domicilio de los detenidos realizado por la Policía se ha encontrado "mucho material que se está analizando por la Policía", entre el que se encuentran distintas cuentas corrientes, y que, por tanto, "la operación sigue abierta". "Estamos trabajando en una operación a la que damos gran importancia, después de todo se trata de financiación de actividades del terrorismo internacional y, por tanto, es una buena operación", sentenció el ministro.
Los dos ciudadanos sirios están acusados de 'blanquear', a través del mercado inmobiliario, dinero que islamistas donaban en España y otros países para hacer la 'yihad'. Uno de los arrestados, Bassan Dalasi Satu, había sustituido presuntamente a Mohamed Kalaje, condenado por la 'Operación Dátil', al frente del entramado financiero, informó hoy el Ministerio del Interior.
Bassan Dalasi Sau, de 48 años, y el otro detenido, Samer Dabbas, de 30, están acusados de colaboración con organización terrorista, falsificación de documento mercantil y blanqueo de dinero. Para 'blanquear' el dinero creaban sociedades instrumentales, a cuyo frente situaban a testaferros.
Parte del dinero procedía de inversores islamistas españoles y extranjeros que, a través de distintas empresas, lo introducían en el circuito financiero para blanquearlo. En la mayoría de las ocasiones el dinero era invertido en la construcción de viviendas, que luego se vendían. Los beneficios obtenidos salían fuera de España.
Las detenciones se produjeron ayer por orden del Juzgado Central de Instrucción Número 2 de la Audiencia Nacional. En los registros efectuados se ha incautado dinero en efectivo por valor superior a los 120.000 euros, encontrado en una caja fuerte oculta en la cocina, diferente documentación de prensa relacionada con el terrorismo internacional, material informático y teléfonos móviles.