El Supremo vuelve a rechazar las últimas pruebas solicitadas por las hermanas de Puig Antich

Actualizado: miércoles, 23 mayo 2007 19:05

MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -

El Pleno de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo volvió hoy a rechazar las últimas pruebas solicitadas por las hermanas del anarquista catalán Salvador Puig Antich para fundamentar su solicitud de que se revise la sentencia que le condenó a muerte, informaron hoy fuentes del alto tribunal.

Las hermanas de Puig Antich habían presentado un recurso de súplica contra el auto del pasado 20 de marzo en el que se rechazaron las pruebas solicitadas porque no aportaban "nada nuevo". Entre ellas figuraba un informe sobre el acta de la autopsia realizada al subinspector Francisco Anguas, por cuya muerte se condenó a Puig Antich. El magistrado José Luis Calvo Cabello emitió un voto particular en el que defendía la admitisión de esta prueba para aclarar ciertos añadidos a máquina y a mano que contenía el documento.

Sin embargo, el tribunal decía haber percibido desde el primer momento los añadidos referidos por la representación de Puig Antich, "por lo que la pericial propuesta resulta a todas luces innecesaria. Lo mismo cabe decir respecto a las palabras que originalmente fueron dactilografiadas en dicho documento y retocadas o corregidas", afirmaba el auto al respecto.

La Sala Quinta también explicaba que la petición de que declare Francesc de Paula Caminal y Badía, que fue codefensor de Puig Antich junto a Oriol Arau Hernández durante la instrucción de la causa, debía ser rechazada, porque se trata de un testigo de referencia, y porque "coincide en lo sustancial con lo dicho por Salvador Puig Antich tanto en el sumario como en el juicio oral".

La defensa lo había solicitado para que explicara cómo Puig Antich le contó cómo se produjo "el forcejeo tumultuario en un espacio reducido donde se produjeron disparos de diversas armas y en el que nunca tuvo intención de matar a nadie".

El tribunal dio por concluido el trámite de alegaciones sobre el testimonio prestado por el doctor Joaquín Latorre, quien en septiembre de 1973 era médico residente en el Hospital Clínico de Barcelona, ayudante del doctor Ramón Barjau, al entender que la familia de Puig Antich lo aporta en su recurso de súplica.

El doctor Latorre, al igual que sostenía Barjau, declaró en el Supremo que el cadáver del subinspector Francisco Anguas, por cuya muerte fue condenado Puig Antich, presentaba al menos cinco impactos de bala y que ignoraba por qué en la autopsia figuraban sólo tres.

Por este motivo, la diferencia entre los impactos que se atribuyeron al anarquista catalán y los que tenía el cuerpo, la familia también quería que se interrogara al médico que hizo la autopsia, pero según los forenses no se encuentra en condiciones de declarar.