La denunciada asegura que la chica, a la que alquiló una habitación, ejercía la prostitución por voluntad propia
PONTEVEDRA, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra citará de nuevo a una joven portuguesa que hoy no acudió al juicio contra su casera Gladys de Jesús M. de M., una colombiana a la que acusó de retenerla contra su voluntad y obligarla durante meses a prostituirse.
Antes de la suspensión del juicio declaró la acusada, quién señaló que se limitó a alquilar una habitación a la joven que, con el apodo de "la portuguesa", ejercía la prostitución por su propia voluntad, lo mismo que otras jóvenes a las que también rentó habitaciones porque "necesitaba dinero para ayudar a pagar los gastos del piso" que compartían en Pontevedra.
"Con tal de que fueran limpias y no armaran escándalo, yo no me metía en sus vidas y me daba igual lo que hacían de puertas adentro en sus habitaciones", manifestó la acusada, quien interpretó la denuncia como una represalia porque la presunta víctima "era cochina" y la echó del piso.
Aparte de la denunciante, que no acudió al juicio, la principal prueba de cargo era el testimonio de otra joven a la que la acusada también alquiló una habitación, que inicialmente acusó a la procesada en los mismos términos que la denunciante, aunque hoy se desdijo.
TESTIGO.
Tras manifestar entre lloros que nadie la retuvo contra su voluntad en el piso, y admitir que ejerció la prostitución porque quiso, esta testigo aseguró que acusó falsamente a la procesada porque la obligó, bajo amenaza de muerte, el compañero sentimental de la denunciante.
El juicio discurrió entre rectificaciones y contradicciones, hasta que la fiscal pidió la suspensión para que acuda a declarar la joven portuguesa cuya incomparecencia no fue justificada.
