Toros.- El PP madrileño tilda de necios a los que han votado la prohibición y dice que la sardana mata de aburrimiento

Actualizado: jueves, 5 agosto 2010 15:54

Califica a los nacionalistas de "ridículos", corruptos y caracterizados por la "falta de valor" y la cobardía

MADRID, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -

El diputado regional Juan Soler, del Partido Popular, considera que aquellos que han prohibido en el Parlamento catalán las corridas de toros son unos "necios", los nacionalistas unos "ridículos" y que la sardana también mata, pero "de aburrimiento".

En un post titulado "No prohibiremos la sardana" de su blog personal, el diputado arremete duramente contra aquellos que han defendido la prohibición en Cataluña. "El Parlamento de Cataluña ha prohibido los toros. Necios. Se han envuelto en la falsa, sucia, cobarde, mentirosa defensa de los animales para hacer esa majadería. Es el odio a la nación española lo que les ha llevado a ello, es simplemente porque los toros son la fiesta nacional por antonomasia. Como diciendo la verdad no les seguirían los catalanes, lo han hecho montados en una cochina mentira", sostiene.

Soler manifiesta que la clase política catalana "ha enloquecido por la práctica de la exclusión y el odio profesional de forma desgraciadamente casi generalizada y muy veterana ya en el tiempo". "Pocos se libran de ello", remacha.

Asimismo, Soler prosigue diciendo que varios amigos suyos catalanes "dicen que los nacionalistas son muy corruptos". "Acordémonos cómo Unió acabó en los tribunales por la corrupción que tenía tintes de encontrarse generalizada en su seno, o como están y dónde están Maciá Alavedra y Prenafeta", rememora, pero "ahora la falta de valor, la cobardía, se añade a su lista de sus características esenciales".

ICV, "NEGOCIO FAMILIAR"

El diputado popular arremete contra prácticamente todo el hemiciclo catalán: "Ni los socialistas-nacionalistas (no quiero decir los nacional-socialistas) se libran de ello. Y para qué hablar de esa moribunda Izquierda Unida-Verdes de Cataluña que no es un partido político sino un negocio familiar, con el matrimonio Joan Saura en el Gobierno de la Generalitat e Inma Mayol en el Ayuntamiento de Barcelona (me pregunto si a la izquierda no le dan vergüenza esas pseudodinastías protomonárquicas, tan republicanos ellos para lo que les conviene)".

En este sentido, se dirige al diputado de ICV en el Congreso, Joan Herrera: "Y como chico de los recados ese tipo peculiar que mandan al Congreso de la Carrera de San Jerónimo y que se encuentra a dos duchas de parecer lo suficientemente aseado", dice sin nombrarle.

"Vaya un conjunto. No tienen desperdicio. Todo odio, revancha, rencor, afrentas inventadas, infantilismo político, intereses oscuros y miseria humana. Una lástima, de verdad. Cataluña no merece tan poco", sostiene en su bitácora.

A su juicio, todo ese "antiespañolismo es tan triste, pobre, señero y con tal ensañamiento que los españoles no debemos hacer nada, absolutamente nada al margen de la política". "Se definen solos. Los talibanes no son para este país ni para este momento. A Dios gracias. Ni llevar esa ley a los tribunales, en mi humilde opinión. La discusión es política. Y les vamos a ganar por goleada. A los tribunales que vayan los ciudadanos que han visto agredido su legítimo patrimonio. Los políticos a hacer política que es lo que toca", añade.

"ATAJO DE RIDÍCULOS"

De este modo, insiste con énfasis en que no debe hacerse nada "reactivo e impensado" contra la prohibición de las corridas. "Nada de nada. Ni prohibir la sardana ni tonterías que nos acercaran a su bajo nivel político e ideológico. Y que no me digan ese atajo de ridículos y ridículas que la sardana no es igual que los toros porque no mata. Sí que mata. De aburrimiento. Con perdón. Como los nacionalistas. Esto también lo dicen muchos amigos míos catalanes", sostiene.

"Que nadie piense que quien esto escribe es un taurino obsesivo. Nada más lejos de la realidad. Hace años que no voy a la fiesta. Reflexiono sobre lo ocurrido porque es parte de lo nuestro. Desde una actitud cultural y cosmopolita y no identitaria y aldeana. Recuerdo que Goya y Picasso fueron grandes aficionados, y Ortega y Marañón, y Lorca escribió versos eximios a toros y toreros, y Alberti siempre se dejaba ver en las plazas", recuerda.