PALMA DE MALLORCA, 20 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de UM, Miquel Nadal, anunció hoy que su formación votará en contra de la Ley de Vivienda impulsada por el conseller Jaume Carbonero en el Parlament balear, si el Govern no "reflexiona" sobre la construcción de viviendas en suelo rústico, ya que según manifestó, esta norma no contribuirá a mejorar la situación económica del archipiélago, una de las causas que, según Nadal, ha influido "mucho" en la postura actual de su formación acerca de la Ley.
En una rueda de prensa, Nadal instó al Ejecutivo Autonómico a realizar una "reflexión importante" acerca de la nueva norma que se tramita en el Parlament y señaló que su partido ya ha transmitido esta opinión a los miembros del Ejecutivo, a quienes comunicó, según dijo, la necesidad de agotar la construcción en los suelos urbanos y urbanizables antes de comenzar a ejecutar viviendas en suelo rústico.
Según señaló, UM tiene una postura "que no es coincidente con la resto de las formaciones del Govern" y señaló que los afiliados de UM, en la ronda de reuniones por los pueblos que realizó el presidente, "consideran que no es buena la construcción en rústico", al tiempo que sostuvo que la situación económica siete meses atrás "no era de desaceleración" por lo que desde la formación se considera "importante" tomar medidas para que la situación no termine siendo "una crisis económica".
"Se pueden tomar medidas para favorecer todo este stock de viviendas que están vacías, con ayudas a los jóvenes y a los mayores para que puedan acceder a estas viviendas a precios razonables" manifestó Nadal, quien apostó por la creación de una sociedad pública que recalifique suelo "con total transparencia" y que tenga la participación del Govern, los Consells y los Ayuntamientos.
En opinión del líder de UM, las medidas que se preveían hace ocho meses "no son buenas para ahora", señalando que "la realidad es movible" y recalcando la importancia de realizar "un tento" para determinar qué es lo que más conviene "no sea que se haga una ley que no cumpla los objetivos marcados y tenga efectos perjudiciales".
Sobre la posibilidad de romper el pacto, Nadal recalcó que actualmente hay "divergencias" porque el Ejecutivo Autonómico está formado por partidos distintos "que no tienen una coincidencia absoluta", al tiempo que aseguró que UM "cumplirá fielmente" los pactos firmados y no se plantea las posibilidades de "ruptura, cambio o modificación".
Asimismo, el presidente de la formación señaló la necesidad de que las modificaciones del Plan Territorial Insular sean "muy extraordinarias" y rechazó que éste se pueda cambiar antes de que haya finalizado su vigencia. "Si hay alguna cosa que no se hizo muy bien, se puede modificar, pero no se puede hacer un cambio total" sentenció Nadal, quien señaló que ya han leído la enmienda presentada por el PP a la Ley de Vivienda, manifestando al respecto que no le gusta.
CINCO EJES
Según Nadal, la Ley de Vivienda ha de respetar una serie de elementos fundamentales como la realización de una política de gestión y uso racional del suelo "en consonancia" con los criterios de sostenibilidad adoptados en las islas después de diez años de procesos legislativos en materia de ordenación y planificación.
En este sentido, el presidente de UM recalcó que es el suelo urbano el que se ha de dedicar al uso residencial plurifamiliar, según dijo, como se establece en el planeamiento territorial aprobado por el Consell de Mallorca, al tiempo que señaló como una "prioridad" que los Ayuntamientos se adapten al Plan Territorial de Mallorca.
Asimismo, Nadal apostó por un respeto al principio de seguridad jurídica, la libertad de empresa y a la igualdad de oportunidades en lo que se refiere a la gestión del suelo, recalcando que es "fundamental" disponer de instrumentos legislativos y de planificación "claros".
El presidente de la formación regionalista también apostó por el respeto del actual marco competencial en el que han de ser los Ayuntamientos en primera instancia y los Consells Insulars después, los que aprueben los planeamientos urbanísticos, recalcando que la previsión de que sea el Govern quien apruebe los planeamientos parciales "supondría una ruptura de la estructura competencial establecida en el Estatut".
Otras de las propuestas de Nadal pasa por la contribución para satisfacer la necesidad de vivienda a precio asequible a los colectivos con dificultades de acceso, utilizando según remarcó, "suelo urbano y urbanizable", atendiendo a la caída de las ventas de la vivienda.
Finalmente, señaló la necesidad de cumplir la adaptación de la acción política en materia territorial a la realidad económica y social existente y teniendo en cuenta la desaceleración que sufre el sector de la construcción.