VITORIA 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Fundación Fernando Buesa, Natividad Rodríguez, denunció hoy que "no existe un entendimiento" entre el Gobierno vasco y las víctimas del terrorismo y apostó por que "el nacionalismo se renueve aceptando que la realidad de la sociedad vasca es plural". "El PNV tiene que hacer este recorrido, y si lo tiene que hacer desde la oposición, que vaya", sentenció.
Rodríguez realizó estas declaraciones durante la celebración del Encuentro organizado por la Fundación Fernando Buesa y Aldaketa titulado 'La visibilidad social y política de las víctimas del terrorismo'. La jornada se abrió con las conferencias de Joseba Arregi y Jesús Loza, para continuar con una mesa redonda en la que participaron la ex presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Ana Mª Vidal; la presidenta de Covite, Cristina Cuesta; y la presidenta de la Fundación Buesa, Natividad Rodríguez.
El encuentro se reanudará por la tarde con una mesa redonda titulada 'La política ante las víctimas del terrorismo' en la que participarán Gema González de Txabarri (PNV), Rodolfo Ares (PSE), Carmelo Barrio (PP), Rafael Larreina (EA) y Nerea Gálvez (EB) y que estará moderada por Faustino López de Foronda.
La presidenta de la Fundación Fernando Buesa afirmó que la política para las víctimas "no le puede ser ajena porque ETA mata para imponer su proyecto político" y consideró que los familiares son quienes "han dado los pasos más importantes" para lograr hacer "visibles" a las víctimas ante la sociedad.
Asimismo, denunció la actitud de Gobierno vasco al considerar que "no existe entendimiento con las víctimas" y afirmó que las actuaciones que se realizan desde el Ejecutivo las hacen "presionados por la sociedad". "Esto produce un estado de desamparo y desprotección en los familiares", denunció.
La presidenta de la Fundación señaló que el objetivo de la misma es "trabajar para conseguir la deslegitimación social y política de ETA" y consideró que la ley de Víctimas del Terrorismo, recientemente aprobada, es "muy importante", aunque lamentó que hasta ahora no había ninguna legislación que hiciera referencia a las víctimas.
RENOVACIÓN DEL NACIONALISMO
Además, consideró "importante" que el nacionalismo "se renueve y acepte que la realidad de la sociedad vasca es plural, y en consecuencia realice proyectos integradores para que no haya vascos de primera y de segunda". Al respecto, exigió un "esfuerzo" al Ejecutivo vasco para "recuperar a los ciudadanos que han sido víctimas del terrorismo y que se encuentran exiliados".
"El PNV tiene que hacer este recorrido, abrir una ventana para que haya aire fresco, y si lo tiene que hacer desde la oposición, que vaya", sentenció.
La presidenta de Covite, por su parte, recordó que la asociación está integrada por 400 víctimas que residen principalmente en el País Vasco y denunció que la visibilidad de las víctimas en Euskadi "no existe". "El magma de convivencia social y político es un medio viciado por la falta de libertad que está motivada por el miedo", señalo.
Cuesta subrayó que la "inocencia" de las víctimas es algo que "ha costado mucho ganar", debido a la "relativización que hace unas décadas se hacía de los crímenes y que provocaba el aislamiento de las víctimas". Además, señaló que la visibilidad política "está aún por llegar", ya que "los comportamientos y actitudes políticas son insuficientes porque se quedan en el ámbito privado y en una primera fase".
La portavoz de Covite defendió que las víctimas "son ciudadanos políticos" e indicó que "nuestros verdugos deben estar fuera del discurso político para evitar que sus razones queden legitimadas". Por ello, reivindicó "justicia penal, social y política para las víctimas".
Finalmente, se mostró a favor de la "situación actual de consenso aparente entre los partidos políticos" y señaló que Covite está en contra de "la negociación y de actuar con el mundo de ETA como interlocutor político", así como de la "impunidad final".
La ex presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Ana Mª Vidal, subrayó la necesidad de despertar en los ciudadanos la sensibilidad hacia las víctimas, ya que "durante muchos años se ha estado tragando y viéndolo con naturalidad". "Las víctimas no pedimos nada especial, sino que se acabe con ETA y que se nos tenga cariño", concluyó.