Las víctimas se plantean salir a la calle en 2011 si el Gobierno no acepta antes sus condiciones para el fin de ETA

MADRID 2 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las víctimas del terrorismo han marcado en su agenda el final de 2010 como la fecha límite para que el Gobierno deje clara su posición en política antiterrorista y desvele si acepta los principios básicos que fijaron las asociaciones sobre las condiciones en las que deberá basarse un eventual fin del terrorismo. En caso contrario pondrán en marcha diversas medidas que incluyen la posibilidad de volver a manifestarse en la calle.

La pasada semana, la práctica totalidad de colectivos y asociaciones de víctimas se reunieron en torno a un documento en el que pedían un final del terrorismo sin impunidad y plasmaban algunas de sus condiciones, como que ETA y su entorno condenen toda la historia del terrorismo para poder participar en el juego democrático.

Este documento se hizo público tras meses de intensas negociaciones al término de los cuales las asociaciones acordaron también fijar fin de año como fecha límite para recibir una respuesta clara del Gobierno al respecto, según han desvelado algunos de los asistentes a las reuniones.

El texto presentado, que consta de un documento de quince folios y un decálogo final, fue remitido tanto al Gobierno como a las principales instituciones del Estado, además de todos los diputados y senadores de las Cortes Generales.

PRESOS ETARRAS Y ELECCIONES MUNICIPALES

Las víctimas reconocen en él que la situación de "debilidad" de la organización terrorista ETA hace suponer que se pueda empezar a ver su final, "aunque su decadencia puede ser aún larga y causar daño". Por ello, dejan claro cuáles son, a su juicio, las condiciones en las que debe producirse este final del terrorismo.

Según han reconocido, observan con preocupación algunas de las decisiones del Gobierno, sobretodo las relacionadas con la política penitenciaria y movimientos de presos, y el panorama que se abre de cara a las elecciones municipales del próximo año y las posibilidades que se otorguen al entorno etarra para poder presentarse.

Ante esta posibilidad, algunas de las asociaciones y colectivos de víctimas no descartan poner en marcha movilizaciones después de las vacaciones navideñas si el Gobierno no deja clara su posición y animar a los ciudadanos a salir a la calle para exigir una política antiterrorista que tenga el único objetivo de "derrotar" a la banda sin ningún tipo de negociación o concesión.