Catalán dice que el Gobierno de Navarra seguirá en contacto con el vasco para promocionar el euskera

Actualizado: miércoles, 7 octubre 2009 16:43

PAMPLONA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Educación, Relaciones Institucionales y portavoz del Gobierno, Alberto Catalán, aseguró hoy que el Gobierno de Navarra se seguirá manteniendo en contacto con el Ejecutivo de la Comunidad Autónoma Vasca para promocionar el euskera en ambas comunidades, y así desarrollar el protocolo de colaboración suscrito por Miguel Sanz y Patxi López el pasado mes de julio.

Así lo señaló el consejero en comisión parlamentaria, a petición de Nafarroa Bai, para informar sobre el acuerdo político a realizar con el Gobierno de la Comunidad Autónoma Vasca sobre política lingüística. Catalán, que fue emplazado por la coalición a dar cuenta de a dónde van a ir destinados los fondos que lleguen de la CAV para promocionar el euskera, no explicó a qué se va a dedicar esta cuantía.

Durante su comparecencia, Catalán destacó que uno de los objetivos del Gobierno de Navarra durante esta legislatura ha sido "intensificar las relaciones institucionales con las comunidades limítrofes", es decir, con la CAV, Aragón y La Rioja, a través de "la cooperación en asuntos y proyectos de interés para los ciudadanos".

"Este es un compromiso que conozco perfectamente y en el que me he involucrado e implicado de manera especial", destacó el consejero, quien explicó que en el marco de este compromiso se sitúa el protocolo de colaboración firmado entre los presidentes de Navarra y Euskadi el pasado 3 de julio, y en el que se manifiesta la necesidad de mantener relaciones "basadas en los principios de colaboración y cooperación".

En lo referente a la política lingüística, el protocolo señala, indicó Catalán, que ambos gobiernos tienen la voluntad de "proteger el euskera" al considerarlo como "idioma que enriquece el patrimonio cultural". No obstante, destacó que lo que ocurre en Navarra "es diferente a lo que pasa en otras comunidades bilingües cien por cien", ya que, según recalcó, "aquí hay una zona que habla vascuence y castellano, pero hay otra zona que habla castellano y que está apostando más por el inglés que por el vascuence".

Así, defendió que "todo debe ser compatible" y censuró "la utilización del euskera como arma política a la hora de la incorporación de Navarra a Euskadi" por parte de algunos grupos políticos como NaBai. "Ésta es la diferencia entre Nafarroa Bai y UPN", sentenció Catalán, tras reclamar que "se aleje este debate en la medida de nuestras posibilidades dentro de esa utilización política partidista".

LOS GRUPOS

En el turno de intervenciones, la parlamentaria de Nafarroa Bai Maria Luisa Mangado hizo hincapié en conocer a dónde va a ir destinado el dinero que proceda de la Comunidad Autónoma Vasca para fomentar el euskera, ya que, teme que esta cuantía no sea utilizada "correctamente" al ser el Ejecutivo foral el encargado de decidir en qué se emplea.

En su opinión, es necesario conseguir la normalización del euskera al ser "un derecho" tanto de los ciudadanos navarros como vascos, y porque "conocer esta lengua y sus raíces enriquece a todo el mundo".

Por su parte, la parlamentaria regionalista Carmen González aseguró que desde UPN esperan que continúe la colaboración entre las Administraciones de ambas comunidades limítrofes, pero "siempre desde el respeto institucional y diferenciando que son dos comunidades diferentes".

Por parte del PSN, María Victoria Arraiza, constató que el asunto del euskera "ha traído siempre disgustos y líos", por lo que consideró que su normalización "es el camino más adecuado para alejar las tensiones". Así, pidió "tranquilidad y seriedad" al asegurar que "tratar de poner piedras" en torno a la política lingüística "puede producir grandes coscorrones que no ayudan a que las cosas sean normales".

Finalmente, José Andrés Burguete, de CDN, destacó que el euskera "forma parte del patrimonio cultural de Navarra" y que "hay que tratarlo como tal", motivo por el cual aseguró que el Ejecutivo foral "está obligado a establecer cauces de colaboración con la CAV", y que obliga a los grupos políticos a "ser capaces de superar las dificultades de esta situación y tratar el euskera como una riqueza".