Detenidas dos personas integrantes de una célula de distribución de cocaína

PAMPLONA, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Pamplona a J.A.G.H., de 31 años y a su pareja L.M.D.O, de 34 años, ambos nacidos en Colombia y residentes en Burlada y Nuevo Artica (Navarra), como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. Los arrestados formaban parte de una célula de distribución de cocaína, vinculados a una organización de narcotraficantes colombianos.

Las detenciones se produjeron el pasado día 17 como culminación de unas investigaciones a las que estaban siendo sometidos desde hace meses por su presunta vinculación con una organización de narcotraficantes colombianos que fue desarticulada en junio último en Madrid, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.

Su participación en la organización desarticulada se enmarcaba como distribuidores de partidas de cocaína que adquirían al escalón superior afincado en Madrid. La cocaína llegaba desde Colombia por diferentes vías y era recepcionada por la organización establecida en la capital de España, que la ocultaba en varias viviendas.

En ellas era adulterada o 'cocinada', añadiéndole sustancias químicas para aumentar la cantidad, disminuyendo su pureza o concentración de principio activo, devolviéndole posteriormente por diferentes procedimientos su textura, color, olor y presentación original.

De esta manera, era vendida a los distribuidores, repartidos por varias comunidades de todo el territorio nacional como una droga de gran calidad, siendo realmente un tipo de cocaína con una pureza media.

El hermetismo de la organización de importación y distribución de la droga era extraordinariamente alto, no permitiendo que personas ajenas a su círculo conocieran ningún tipo de detalle acerca de su actividad, consiguiendo con ello mantenerse en la clandestinidad.

Los miembros de la organización de Madrid llevaba a cabo una vida aparentemente normal, con un ritmo de vida medio, sin grandes excesos ni lujos, a fin de no despertar sospechas que delataran su actividad ilícita.

Sin embargo, según la Policía Nacional, contrastaba con el ritmo de vida de la que hacía gala el distribuidor detenido J.A.G.H., que a pesar de no desarrollar actividad laboral alguna desde hace años, residía en una vivienda alquilada, acudía todos los días a establecimientos de hostelería y ocio, vestía ropa de marca y utilizaba diariamente taxis en la mayoría de sus desplazamientos. Cuando fue detenido acababa de regresar de disfrutar de unas vacaciones en Ibiza.

En relación a su elevado ritmo de vida, en el registro de las dos viviendas de las que disponía fueron decomisados numerosos bienes adquiridos con las ganancias que percibía de la venta de cocaína, como ordenadores portátiles, una consola y videojuegos con un valor cercano a los 500 euros, varios teléfonos móviles de última generación, una colección de perfumes valorada en 475 euros, así como 3.900 euros en efectivo de los que disponía para sus gastos diarios. Se decomisaron, igualmente, dólares americanos y varios miles de pesos colombianos.

El detenido contaba con dos viviendas situadas en Burlada y Nuevo Artica, en las que ocultaba la sustancia estupefaciente y numerosos útiles para la adulteración, prensado, empaquetamiento y distribución de la cocaína.

En el domicilio de Burlada fue intervenida una importante cantidad de cocaína en roca oculta en un doble fondo en el interior de un armario, que de haber sido distribuida al menudeo hubiera supuesto la puesta en el mercado ilícito de más de 3.800 dosis. Junto con la droga se intervinieron tres balanzas de precisión electrónicas.

En el otro domicilio, que compartía con la detenida, fueron intervenidos numerosos útiles y herramientas utilizadas para el prensado y empaquetamiento de la cocaína.

Entre ellos, dos moldes metálicos usados para la elaboración de ladrillos de cocaína de un peso de 1.000 y 250 gramos. En el registro de la segunda vivienda se intervino un gato hidráulico con una fuerza de 2 toneladas y una mordaza metálica de gran tamaño adaptada para ser usada con los moldes encontrados.

La detenida fue puesta en libertad después de ser oída en declaración, haciéndole saber de su obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerido para ello y el detenido, al que le consta una detención anteriores, fue puesto a disposición de la autoridad judicial junto al atestado policial instruido, decretándose su ingreso en prisión.