PAMPLONA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ejecutivo foral invertirá 18 millones de euros en ayudas puntuales y estructurales para solucionar la crisis ganadera, motivada en buena parte por la subida de los precios de los piensos. Estas medidas forman parte del Plan de Emergencia del Gobierno de Navarra, que se estructura en cinco grupos, con un total de 18 medidas.
Dicho plan, hecho público hoy en rueda de prensa por la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Begoña Sanzberro, pretende evitar la desaparición de explotaciones y la reducción de la actividad económica. Para Sanzberro la crisis de los precios de los cereales "demuestra que depender del exterior para el suministro de alimentos entraña graves riesgos" y que "nuestro sector primario nos proporciona alimentos seguros y de gran calidad".
Básicamente, el plan de apoyo del departamento al sector ganadero se estructura en cinco grupos, con un total de 18 medidas que incluyen acciones generales para todo tipo de ganadería, ayudas puntuales para las explotaciones en situación más crítica y ayudas estructurales a largo plazo.
En concreto, las medidas del primer grupo están dirigidas al sector ganadero en su conjunto y se basan en reducciones de la fiscalidad, seguros de recogida de cadáveres, planes de gestión de residuos y disminución de tasas.
El segundo grupo consiste en ayudas directas urgentes para los sectores ganaderos más afectados. "Las ayudas podrán alcanzar los 3.000 euros y se abonarán en el mes de diciembre. Dichas medidas podrán aplicarse a algo más de 1.150 ganaderos con un importe medio de ayuda de 1.850 euros por explotación", explicó Sanzberro.
El tercer grupo de medidas se orienta a las explotaciones ganaderas ubicadas en zonas desfavorecidas y de montaña y a explotaciones ganaderas que asuman compromisos específicos de calidad y gestión del medio ambiente. En el caso de la indemnización en zonas de montaña desfavorecidas el incremento medio de ayuda por ganadero, entre 2008 y 2013, será de 450 euros al año.
En conjunto, las medidas de estos tres apartados están financiadas en exclusiva por el Gobierno de Navarra y en su conjunto suponen más de 2 millones de euros para ayudas directas en 2007, 2,8 millones en 2008 y 2,3 millones en los años sucesivos.
MEDIDAS ESTRUCTURALES Y DE INTERLOCUCIÓN
Las medidas del cuarto grupo mantienen carácter estructural "y pretenden mejorar la situación competitiva de las explotaciones y proporcionar un mayor margen y mayor capacidad de adaptación ante los cambios", según Sanzberro.
Este capítulo comprende medidas de apoyo a las denominaciones de calidad (IGP Cordero de Navarra y Ternera de Navarra), medidas de promoción, así como una nueva línea de ayudas a instalaciones ganaderas intensivas para inversiones en bioseguridad y mejoras ambientales, las ayudas a la modernización de explotaciones (en las que se destina un 75% del presupuesto a explotaciones ganaderas) y el fomento de la artesanía agroalimentaria y de la diversificación hacia actividades no agrarias ni agroalimentarias.
Estas medidas estructurales suponen en su conjunto una dotación anual que supera los 15 millones de euros destinados a explotaciones ganaderas.
Finalmente, el quinto grupo de medidas del plan recoge actuaciones de interlocución e intermediación entre administraciones y entidades y que se concretan en anticipo de ayudas de la PAC y la supresión del certificado veterinario, "que ya se ha producido", según Sanzberro.
Para ello, se han mantenido reuniones con Caja Navarra y Caja Rural de Navarra para transmitirles la importancia de que tengan en cuenta la crisis a la hora de establecer las condiciones de créditos de campaña o de renegociar los créditos ya concedidos. Según Sanzberro, "la disposición de ambas entidades es muy buena".
Igualmente, el departamento ha reclamado a la administración central la adopción de medidas indirectas de apoyo a la ganadería en aquellas cuestiones que son competencia estatal. Concretamente, subrayó la consejera, "se ha reclamado el desacoplamiento total de las ayudas, el anticipo de las ayudas de la campaña 2007, la supresión del certificado veterinario y la exención o reducción de cuotas de la Seguridad Social Agraria.
El plan, aseguró Sanzberro, "es un contrato de mínimos y algunas cuestiones están en el aire, por lo que se aprobarán más medidas". En conjunto, añadió, "dejan clara la apuesta del departamento por el mantenimiento del sector ganadero", ya que estas medidas "son necesarias y se prestan a cambio de nada".
