PAMPLONA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Navarra celebró hoy con "normalidad" su primera sesión después de la ruptura del pacto entre UPN y CDN, una ruptura que supuso la salida de los dos consejeros convergentes del gabinete que preside Miguel Sanz.
Al término de la sesión celebrada esta mañana en el Palacio de Navarra, los consejeros Alberto Catalán y Amelia Salanueva, que han asumido las consejerías dejadas vacantes por CDN, comparecieron en rueda de prensa para dar cuenta antes los medios de los acuerdos adoptados por el Ejecutivo foral.
Preguntado por la ausencia de CDN, Alberto Catalán, que ha sumado la cartera de Educación a sus responsabilidades de consejero de Relaciones Institucionales y portavoz, explicó que "siempre hay algún comentario respecto a que ya no están ni Carlos Pérez-Nievas ni Carlos Esparza, pero estas reuniones de las sesiones de Gobierno se desarrollan con la misma normalidad de cualquier otra reunión".
Así, Catalán señaló que el gabinete de Miguel Sanz "ha analizado la actualidad política y luego ha entrado en materia en aquellas cuestiones que realmente pueden preocupar a la hora de buscar soluciones ante la crisis económica". "Ése es nuestro gran reto y nuestra gran preocupación, y hoy se ha vuelto a poner de manifiesto", aseguró.
Respecto a su nueva responsabilidad como consejero de Educación, Catalán señaló que las últimas jornadas "han sido muy intensas a la hora de mantener las correspondientes reuniones con los responsables del departamento de Educación, que van a continuar en sus puestos de trabajo". "La relación va a ser fluida, directa, y la maquinaria de la Administración no se ha parado en ningún momento ni se va a parar", aseguró.
Por su parte, Amelia Salanueva, consejera de Administración Local y que asume también la cartera de Vivienda y Ordenación del Territorio, explicó que ha tenido una "toma de contacto con todos y cada uno de los funcionarios del departamento y con los directores para ponerme al día de los asuntos". "El tren no se ha parado, nos hemos subido a un tren en marcha y nos hace falta poner velocidad para que no se note para nada el relevo", dijo.
