PAMPLONA 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las obras de construcción del nuevo centro penitenciario de Pamplona en la colina de Santa Lucía darán comienzo después del verano y se desarrollarán durante dos años, es decir, la cárcel podrá entrar en funcionamiento en el segundo semestre del año 2010.
El presidente de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios, Constantino Méndez, compareció hoy en Pamplona en rueda de prensa para explicar que previsiblemente en abril terminará el proceso de expropiación y, teniendo en cuenta que ya se está redactando el proyecto de obra, en verano se sacará a concurso la adjudicación de la obra.
Además, el delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, apuntó que el Consejo de Ministros estudiará antes de las elecciones el expediente de la nueva cárcel y decretará la utilidad pública del centro y la urgente ocupación de bienes y derechos.
Según las previsiones de la Administración, después del verano podrían comenzar los trabajos de construcción de los dos centros de los que constará la nueva cárcel. Se trata del Centro Penitenciario Tipo (CPT), un edificio tradicional de Seguridad; y del Centro de Inserción Social, en el que se realizarán tareas de reinserción.
La construcción del primer edificio costará cerca de dos años. En él habrá una capacidad para 504 reclusos, además de 124 plazas adicionales de enfermería y traslado, entre otras. El Centro Penitenciario Tipo ocupará una parcela de 224.000 metros cuadrados. En el interior de esta parcela, el edificio se construirá en una superficie de 30.000 metros cuadrados.
Constantino Méndez explicó que éste es un centro penitenciario "medio". Actualmente, la cárcel de Pamplona, en el barrio de San Juan, cuenta con 220 plazas. Además, hay 700 personas con penas alternativas a la cárcel.
El presidente de la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios explicó que una de las premisas de su trabajo es "adecuar la capacidad de las infraestructuras a la población penitenciaria de cada zona" y argumentó que "la dimensión de este centro tiene por objeto a la población penitenciaria navarra".
En este sentido, explicó que la política penitenciaria trata de garantizar no solamente procesos de retención y de seguridad para el cumplimiento de los penas, sino también procesos de reeducación y de reinserción.
El Centro de Inserción Social, "pieza esencial para garantizar los procesos de reinserción social, laboral y familiar", contará con 50 plazas, básicamente destinadas a los reclusos de tercer grado y que salen diariamente del recinto. Este edificio ocupa una parcela de 3.900 metros cuadrados y la superficie construida será de 2.700 metros cuadrados.
Sobre la ubicación de la cárcel, Méndez indicó que "la localización de un centro penitenciario es compleja y lamentablemente requiere tiempo", pero destacó que en el caso de Pamplona la parcela elegida "ha sido la que ha generado mayor nivel de aceptación". "Contiene la mayor puntuación técnica y contiene otros muchos elementos más que la hacen idónea en el contexto social navarro", dijo.
Además, Méndez destacó que "los módulos del nuevo centro están muy humanizados, persiguen un ámbito de comunicación muy estrecho, pretenden reproducir una ciudad en el interior del recinto, que el conjunto de actividades que a lo largo del día desarrolla un interno sigan la misma lógica que sigue cualquier ciudadano cuando sale de casa". Así, el centro cuenta con un ámbito residencial; otro ámbito deportivo, cultural y formativo; y otra zona para la comunicación familiar e íntima.
Vicente Ripa destacó que la ubicación y el diseño del nuevo centro penitenciaro se ha consensuado con el Gobierno foral, que además no aporta ni un euro, que su emplazamiento es el más justo socialmente y que se prioriza la reinserción de los reclusos y la comodidad para sus familiares y quienes les atienden en los ámbitos educativo, sanitario y jurídico".
Además, Ripa enmarcó la actuación en la cárcel en "una apuesta multidisciplinar por las infraestructuras de interés para Navarra" y se refirió a la construcción del tren de alta velocidad, el aeropuerto y las autovías Medinaceli-Soria-Tudela, Pamplona-Huesca-Lleida y la del Camino.