Este sábado se ha celebrado en Cáseda un acto de entrega a sus familiares de los restos de tres fusilados en la Guerra Civil
PAMPLONA, 14 May. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales del Gobierno de Navarra, Ana Ollo, ha resaltado este sábado el "papel que la memoria debe jugar a la hora de construir una sociedad más justa, más ética, que mire al pasado de forma crítica".
Ha pronunciado estas palabras en Cáseda, durante el acto de entrega a sus familiares de los restos de tres fusilados en la Guerra Civil, recientemente identificados merced a un convenio suscrito entre el Gobierno de Navarra y la Sociedad de Ciencias Aranzadi.
Ollo ha señalado que con este acto se "da respuesta al derecho de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación". Con él se pretende, asimismo, "el reconocimiento de las víctimas", "resaltar la dignidad humana como un valor que debe reivindicarse por encima de cualquier otra cuestión" y "construir un relato de lo ocurrido justo, veraz y que repare a quienes sufrieron una violencia injusta, una vulneración de los derechos humanos".
El acto ha tenido lugar esta mañana en el Ayuntamiento de Cáseda, y la consejera Ollo ha estado acompañada por el director general de Paz, Convivencia y Derechos Humano, Álvaro Baráibar, y por el jefe de la Sección de Memoria Histórica, Jose Miguel Gastón, ha informado el Ejecutivo foral en una nota.
En el acto se ha hecho entrega a sus familiares de los restos de los casedanos Marcelino Guinda, de 49 años, y Alfonso Guinda, de 54, así como de una tercera víctima todavía no identificada, posiblemente un trabajador del Canal de las Bardenas, fusilados el 28 de julio de 1936. A continuación se ha celebrado un homenaje a todas las víctimas y la inhumación de los restos en el panteón del cementerio de Cáseda destinado a tal fin.
Los restos fueron exhumados el pasado año en Lecaun gracias a la labor de las asociaciones memorialistas y a la reivindicación de los familiares, e identificados este año, en el marco de un convenio de colaboración entre el Gobierno de Navarra y la sociedad Aranzadi para investigar, documentar y recuperar los restos de personas desaparecidas a consecuencia del golpe militar de 1936, de la Guerra Civil y de la represión franquista.
