PAMPLONA 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2008-2011 se materializará en las universidades navarras por medio de convocatorias de proyectos, nuevas infraestructuras y el acceso a diferentes becas.
En concreto, los investigadores en formación podrán optar a becas y contratos del programa nacional de Recursos Humanos, las universidades podrán acoger investigadores post-doctorales a través del programa Ramón y Cajal, y podrán obtener igualmente infraestructuras y acceder a acciones de tipo internacional en las que se coopera.
Con este proyecto nacional se pretende que el porcentaje de PIB dedicado a Investigación, que en cifras del año 2006 en España ronda el 1,2 por ciento, pase al 2,2 por ciento en el año 2011. Actualmente, la media europea se encuentra en el 1,8 por ciento.
En la presentación del plan, que fue llevada a cabo esta mañana en la Universidad Pública de Navarra, el secretario general de Política Científica y Tecnológica del Ministerio de Educación y Ciencia, Francisco José Marcellán, destacó que "Navarra tiene un potencial muy importante ya que es la segunda Comunidad con inversiones cercanas al 2 por ciento del PIB en materia de I+D+i".
En cuanto a los centros universitarios, Marcellán indicó que la UPNA y la Universidad de Navarra "destacan en determinados campos por su excelencia" y en concreto, detalló que la Universidad Pública orienta su actividad a temas de biocombustibles y la UN a la imagen médica.
El secretario general de Política Científica y Tecnológica comentó que la situación de Navarra en este ámbito "es una prueba de que se hacen apuestas por parte del Gobierno de Navarra y hay que conseguir que estas apuestas sean sostenibles en el tiempo". Y deseó que la apuesta que el Gobierno foral hace por las universidades de la Comunidad "no sea coyuntural sino que sea de manera permanente y estructural para que se facilite la propia competitividad que tienen las universidades de Navarra, no sólo en España sino a nivel internacional".
Por ello, el secretario general de Política Científica y Tecnológica destacó que "tiene que haber una inversión sostenida por parte del estado pero también un protagonismo importante por parte del sector privado". Así, Marcellán anunció que en España un 55 por ciento de la inversión es pública y un 45 por ciento de la inversión es privada.
Marcellán instó a todos los organismos públicos y privados a "reforzar esa inversión del sector privado y en esto tiene que ver que la ciencia y la tecnología no sólo genera riqueza para el empresario sino que genera identidad de país y bienestar para los ciudadanos".
EL PLAN
El Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2008-2011, que lleva en marcha desde el 1 de enero y que cuenta con un presupuesto de 8.078 millones de euros, es un instrumento utilizado por la Administración General del Estado para establecer los objetivos y prioridades de la política de investigación e innovación a medio plazo.
Entre sus líneas de trabajo, figura la generación de conocimientos y capacidades orientados a formar e incorporar personal altamente cualificado, tanto en el sector público como privado; fomentar y mejorar la colaboración entre las administraciones públicas y privadas; promover la innovación tecnológica para mejorar la competitividad empresarial en sectores clave para el desarrollo socioeconómico de España; y desarrollar acciones estratégicas concretas en, entre otros, los campos de Salud, Biotecnología, Energía y Cambio Climático, Nanotecnología y nuevos materiales y procesos industriales.
Este plan busca convertirse en una guía útil que facilite anualmente la mayor y más eficaz participación en el desarrollo de I+D+i de los agentes del sistema español de Ciencia y Tecnología (empresas, universidades, centros tecnológicos, parques científico-tecnológicos o asociaciones empresariales) mediante la identificación de las oportunidades.
NOVEDADES DEL PLAN
El plan 2008-2011 presenta novedades importantes en su gestión. En concreto, se plantea la creación de una "ventanilla única" a través de un único portal web, como sistema de acceso a todas las ayudas públicas de la Administración General del Estado de apoyo a la I+D+i. Por ello se propone así, un sistema informático único de gestión y la utilización de un formulario normalizado para las convocatorias de todos los programas nacionales. Con todo ello se pretende reducir la carga burocrática que soportan los beneficiarios de las ayudas.
Otra de las novedades es la simplificación de las estructuras de gestión de los programas nacionales que racionaliza e integra los instrumentos existentes y diseña otros nuevos con el objetivo de evitar duplicidades.
Por otra parte, la profesionalización de la gestión, aprovechando el desarrollo de la Ley de Agencias y la separación entre las funciones de diseño, financiación y supervisión de las tareas de gestión administrativa.
Y por último el establecimiento de un procedimiento estandarizado para la evaluación de proyectos que incluirá, cuando sea necesario, la evaluación internacional, así como el fortalecimiento de los mecanismos de seguimiento y evaluación de las actuaciones contempladas en el plan por parte de paneles científicos y tecnológicos.